Mientras los docentes bonaerenses iniciaban ayer su segundo paro de 48 horas, con alto acatamiento según los gremios, el gobierno de Daniel Scioli informó que realizará una nueva y “última propuesta” salarial a los maestros para intentar destrabar el conflicto. El anticipo de una oferta superior al 17,8 por ciento de incremento –el aumento que ya rechazó el Frente Gremial Docente– se produjo cuando los dirigentes sindicales advertían que la semana que viene podría haber nuevas medidas de fuerza si no se alcanza un acuerdo en las negociaciones paritarias.

En reclamo de un aumento del 30 por ciento, los sindicatos docentes cumplieron una huelga lunes y martes de la semana pasada y están realizando otro paro ayer y hoy, “con una adhesión que oscila entre el 97 y el 100 por ciento”, de acuerdo con los datos del Frente Gremial Docente. Esta vez, la medida afecta también a las escuelas secundarias, cuyo ciclo lectivo debía comenzar ayer, mientras que los niveles inicial y primario empezaron hace una semana.

“La contundencia y firmeza de esta medida de fuerza es el resultado evidente de la falta de decisión política para dar una respuesta a las justas demandas de los docentes”, dijo la presidenta de la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), Mirta Petrocini. “Las autoridades llevaron al límite del inicio de clases la discusión, tratando de imponer una cifra, un porcentaje”, estimó. Desde Suteba (Ctera), otro de los gremios que integran el Frente, Roberto Baradel advirtió que “si la actitud del gobierno no se modifica, la semana que viene va a estar paralizado todo el sistema educativo de la provincia de Buenos Aires”.

Además, Baradel denunció que “varios empleadores de la educación privada están amenazando a los docentes con el despido por llevar adelante las medidas de fuerza. No lo vamos a permitir”, recalcó y aseguró que se harán marchas a la “escuela privada que eche a un solo” maestro.

Fue en ese contexto (al que se suman un paro y reclamos salariales de los trabajadores estatales) que el gobernador Scioli mantuvo una reunión con su jefe de Gabinete, Alberto Pérez, y los ministros de Economía, Silvina Batakis, y de Trabajo, Oscar Cuartango, y la directora de Cultura y Educación, Nora de Lucía. Tras el encuentro, la gobernación informó que la provincia hará “el máximo esfuerzo” para mejorar la oferta salarial inicial. Una vocero explicó que todavía “no está definido el día en que se convocará a los gremios a la reunión paritaria para presentar la nueva oferta”.

Antes de la reunión, el ministro Cuartango había declarado que el 17,8 por ciento de aumento (en tres cuotas) era “la mejor oferta” que podía hacerles la provincia a los maestros. “Hace falta plata, de dónde provenga ese dinero es lo de menos”, respondió cuando se le preguntó si el distrito precisa un aporte extra del Estado nacional. Subrayó que “no” esperan “una señal” del gobierno nacional para presentar otra propuesta, pero aseguró que “si viene (el dinero) será bienvenido”. También les pidió a los maestros que “no tomen medidas de tanta magnitud” como los paros.

Hasta anoche, los maestros no habían sido convocados formalmente a un nuevo encuentro paritario. Los dirigentes del Frente Gremial analizarán el plan de lucha entre mañana y pasado y luego definirán cómo siguen.