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Diez mil jóvenes colmaron ayer el microestadio de Argentinos Juniors para participar de la convocatoria de Unidos y Organizados a tres años del acto de la juventud militante en el Luna Park al que asistieron la presidente Cristina Fernández y el ex mandatario Néstor Kirchner. El diputado Andrés Larroque recordó el 14 de septiembre de 2010 como “el momento de irrupción” de la militancia juvenil, que “estaba dispersa y necesitaba un hecho político para manifestarse como actor” del proyecto nacional. Afirmó que se consolidó “la fuerza política de Cristina, que la acompañara en el momento más difícil de su vida”, cuando falleció Néstor. “En los jóvenes militantes está el futuro de la Argentina”, asintió.

Bajo la consigna “Néstor en todos, todos con Cristina”, llegaron miles de jóvenes al estadio, donde se dispuso un escenario con gigantografías de Néstor y Cristina. Allí estaban Larroque, el senador Daniel Filmus; los diputados Eduardo “Wado” De Pedro y Leonardo Grosso; y los candidatos Juan Cabandié, Victoria Montenegro, Alex Freire y Ricardo Forster. Del otro lado, militantes de Movimiento Evita, Nuevo Encuentro, Descamisados, La Güemes, Segundo Centenario, Partido Comunista Congreso Extraordinario, Miles, Los Kumpas, Kolina, Tupac Amaru, Peronismo Militante, Martín Fierro, La Cámpora, La 26 de Julio y el Frente Transversal.

Celebraron lo que el diputado Andrés Larroque recordó como “la epopeya de Néstor”, que tuvo lugar el 14 de septiembre de 2010, cuando con un cuadro de salud delicado y a contramano de la recomendación de su médico, el ex presidente encabezó el encuentro con la juventud. “La militancia estaba dispersa y necesitaba un hecho político para manifestarse como actor”, consideró, y concluyó que “fue ese acto el momento de irrupción”.

“Los pibes y pibas que estaban ahí se transformaron en la fuerza política de Cristina”, destacó en alusión al apoyo juvenil a CFK tras la muerte de Kirchner. “El 27 de octubre, el subsuelo de la patria volvía a sublevarse en forma de juventud”, aseguró y calificó aquella jornada como “un hecho masivo, inocultable”. “Brotaban jóvenes a llorar por ese hombre que los habían convocado a transformar la realidad”, manifestó.

Por otro lado, sostuvo que “a los medios hegemónicos no les parece alentador para el futuro la militancia de estos jóvenes”, por lo que buscan “invisibilizarlos”. “Péguennos a mí, a (Mariano) Recalde, a (Juan) Cabandié, a Wado (De Pedro), a Máximo (Kirchner), pero no toquen a un militante más”, pidió y avisó: “No se metan más con los militantes porque ahí esta la esperanza de la Argentina, no sean estúpidos”.