Desde Corrientes

Los correntinos elegirán hoy un nuevo gobernador. Los candidatos favoritos son el gobernador radical Ricardo Colombi (Encuentro por Corrientes) y el intendente de la ciudad capital, Carlos “Camau” Espínola (Frente para la Victoria), que buscará destronar a la familia Colombi y colocar por primera vez en 40 años a un peronista al frente del gobierno provincial. También se postulan el senador nacional de la UCR Eugenio “Nito” Artaza (Cambio Popular) y el peronista disidente Manuel Sussini (Compromiso Correntino), que no pudieron sortear la marcada polarización entre los principales contendientes. Con las legislativas de octubre a la vista, las elecciones generan expectativas a nivel nacional. El radicalismo pone en juego la última provincia que le queda, mientras que el kirchnerismo busca revertir el escenario que dejaron las primarias.

Así como durante los años ’90 los hermanos Tato y Pocho Romero Feris fueron los hombres fuertes de la provincia, el apellido Colombi –de la mano de los primos Ricardo y Arturo– se impuso a partir del 2001, cuando concluyó la última intervención federal. De origen radical, los dos habían acordado alternarse un mandato cada uno hasta que, en 2009, Arturo rompió el pacto y decidió buscar su reelección. En aquella ocasión, el diputado kirchnerista Fabián Ríos intentó terciar en la pelea y por poco quedó en el tercer lugar con el 30,7 por ciento de los votos, detrás de Arturo (31,7) y de Ricardo (36,3), que pasaron a la segunda vuelta, que finalmente ganaría este último.

Una de las sorpresas de aquella elección fue la victoria de Camau Espínola como intendente de la capital correntina, posicionándose como figura ascendente en el distrito. Así quedó configurado un escenario político provincial que hoy se mantiene sin mayores variantes.

Complicado por la causa judicial en la que está procesado por el manejo irregular de 30 millones de pesos, Arturo quedó relegado en la política correntina, aunque hoy aspira a una banca en el Senado provincial de la mano del sindicalismo local, aliado al camionero Hugo Moyano. A pesar de la pelea familiar, la boleta de Arturo se verá hoy en el cuarto oscuro pegada a la lista de su primo Ricardo, en una de las tantas listas colectoras de la compleja política correntina.

El frente ECO está liderado por la UCR, pero lo integran en total 19 partidos políticos. Ricardo Colombi lleva a un peronista disidente como candidato, Gustavo Canteros, apoyado por el gobernador cordobés José Manuel de la Sota, quien estuvo en la provincia para apuntalar su campaña y hoy podría volver si resulta ganador. El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, y su vice María Eugenia Vidal también visitaron Corrientes. Macri dejó un mensaje telefónico llamando a votar a Colombi mientras que Vidal se mostró en dos oportunidades junto a Pedro Braillard Pocard, actual vicegobernador y candidato a intendente de la capital.

Victoria Donda y Alfonso Prat-Gay también visitaron la provincia y se reunieron con Colombi y otro tanto hicieron los presidentes de la Sociedad Rural, Luis Etchevehere, y de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi. Sergio Massa lo llamó por teléfono para desearle suerte. Los radicales también se mostraron con el gobernador.

El kirchnerismo hizo un enroque respecto de 2009. Camau va por la gobernación y Ríos apunta a la intendencia. Espínola, medallista olímpico de windsurf, cultiva el estilo político de su padrino: Daniel Scioli. Hace unas semanas, el PJ nacional le dio una importante señal de apoyo y realizó en Corrientes un encuentro de una docena de gobernadores. Estuvieron, entre otros, Scioli, José Luis Gioja (San Juan), Jorge Capitanich (Chaco), Sergio Urribarri (Entre Ríos), Juan Manuel Urtubey (Salta) y funcionarios nacionales como el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, y el titular de la Anses, Diego Bossio. Cristina Fernández realizó una videoconferencia con Camau.

Artaza entró a la Cámara alta en 2009 de la mano de Colombi, de quien fue alejándose hasta convertirse en su adversario. Desde el entorno del gobernador lo acusan de ser funcional a la Rosada, al disputarle parte del electorado radical y dificultar así un triunfo en primera vuelta.

Con la elección casi encima, se fueron desvaneciendo los pronósticos de una victoria holgada por parte del gobernador, que había asegurado una diferencia de 11 puntos sobre Camau. Fuentes de la gobernación hablaban ayer de cuatro a siete puntos de ventaja, aunque aclaraban que “la política correntina es imprevisible”. En el bunker de Camau eran más prudentes y adelantaban un escenario donde los dos superaban el 40 por ciento con una leve ventaja para el kirchnerista.

Una de las cuestiones que alteró el escenario local fue la decisión del Superior Tribunal de impedir la postulación de 13 intendentes que aspiraban a la re-reelección. Los mandatarios municipales argumentaron que el impedimento de la Constitución reformada en 2009 no podía aplicarse retroactivamente y que no debía computarse como primer mandato el de 2005 a 2009. La Corte no convalidó esa interpretación y los intendentes, aliados de Colombi, utilizaron una maniobra para sortear la decisión judicial: invirtieron la fórmula con el candidato a vice e imprimieron nuevamente las boletas con su nombre mucho más grande.