Sergio Massa siguió ayer cosechando rechazos por su decisión de presentar un proyecto para limitar los mandatos de los intendentes bonaerenses. En el kirchnerismo rechazaron la iniciativa, a la que el ministro del Interior, Florencio Randazzo, calificó de “oportunista”. La única excepción fue el ex intendente de José C. Paz, Mario Ishii. Desde el PRO, Mauricio Macri aclaró que él no va a la saga de Massa, sino que tiene un proyecto desde 2006 para reformar los mandatos. Desde FA-Unen, la diputada Margarita Stolbizer reclamó una reforma integral. Diversos intendentes reclamaron que también se acoten los mandatos de los legisladores.

Massa presentó ayer su proyecto, que propone limitar la cantidad de elecciones de los intendentes bonaerenses a un máximo de dos (dependerá de cada municipio el tope, que podría también ser de un mandato). Desde su propio espacio político, el intendente de Merlo, Raúl Othacehé –que está al frente del municipio desde 1991–, rechazó la iniciativa. Ayer le contestó el secretario general del Frente Renovador, Adrián Pérez: señaló que no apoyaría a un eventual candidato a gobernador de Othacehé porque “no representa la renovación”. Indicó que su espacio “tiene dirigentes como Sergio Massa, Joaquín de la Torre en San Miguel, Gabriel Katopodis en San Martín y (Luis) Andreotti en San Fernando, dirigentes que han venido a renovar la política”. Advirtió que “todos han tenido gestiones muy modernas, nuevas y con un nivel de adhesión importante, por lo que este tipo de dirigentes son los que estamos tratando de promover”.

Tras la disputa con Othacehé, el resto de los intendentes que responden a Massa se pusieron en caja. El intendente de San Isidro, Gustavo Posse –que conduce el municipio desde 1999– afirmó que adhiere a la iniciativa y señaló que también plantea “implementar el régimen de autonomía municipal, que no está en la Constitución de la provincia de Buenos Aires”. “Tiene que ver con no atornillarse al poder”, destacó el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis. El de San Fernando, Luis Andreotti, opinó que “con la reelección ilimitada el intendente se volvió un emperador”. “Desde el primer día que llegamos creemos que hay que fortalecer las instituciones y una forma es limitar las reelecciones indefinidas, en este caso de los intendentes”, dijo. De los 23 intendentes que contabiliza el Frente Renovador, hay 13 que ya cumplieron con más de un mandato. Once, más de dos mandatos.

Desde el PRO, el intendente de Vicente López, Jorge Macri, se mostró a favor: “Cuando un intendente se queda mucho tiempo en el poder, la mayoría de los buenos que llegaron con él se van. Es bueno alternar”. Su primo, el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, salió a aclarar que él no apoya el proyecto de Massa sino que, en realidad, es al revés: “Massa empezó a tener coincidencias con nosotros; no nosotros con él. Hay un proyecto desde 2006 planteando lo mismo”. Lo cierto es que, como ocurrió con el rechazo a la reforma del Código Penal, Macri terminó siguiendo una iniciativa de Massa, con la que le ganó de mano. “Lo que le sumé fue que les agreguemos a los legisladores y senadores provinciales y que no hagamos trampa al espíritu de la reforma alternando con familiares directos”, sostuvo Macri, quien terminó por reconocer que apoyaría la iniciativa.

Con la misma reticencia, desde Frente Amplio Unen (FAUnen) pusieron más condiciones para acompañarlo. La líder del GEN, Margarita Stolbizer, planteó que “debe incluir el sistema D’Hont, que es el que respeta la proporcionalidad que nos indica la Constitución provincial, y es el sistema por el cual se eligen los legisladores nacionales”. “Desde el FAP ya se presentaron varias iniciativas para reformar el sistema electoral”, dijo. “Estamos más de acuerdo con la implementación de la boleta única que con el voto electrónico, porque a nivel internacional no hay pruebas que avalen la transparencia del voto”, remarcó. El diputado de la Coalición Cívica Pablo Javkin consideró que “en materia de transparencia electoral, no hay que poner parches, sino tomar las experiencias exitosas como es el caso de la boleta única”. “Si es cierto que Sergio Massa y Mauricio Macri quieren ir hacia un sistema político más transparente y en donde el ciudadano tenga mejores condiciones para poder elegir se deberían manifestar a favor de nuestro proyecto de boleta única que reproduce a nivel nacional la experiencia exitosa de Santa Fe”, desafió.

En el kirchnerismo, en tanto, hubo un rechazo frontal a la iniciativa, con la sola excepción de Ishii. “Estoy de acuerdo a limitar a dos o tres mandatos, pero si el intendente es bueno, la gente lo elige”, dijo. Para el senador Aníbal Fernández, en cambio, el proyecto “es onanismo político”, además “poco serio y otro de los tantos versos de farsantes”. Fernández calificó a Massa de “poco serio y bruto interesante”. “Es como el mate cocido, llena pero no engorda”, lo definió. Fernández citó la Constitución provincial para defender su postura y dijo que no debe haber limitaciones para el voto popular. “Si el gobernador o intendente no está a la altura de lo que reclama la sociedad, los van a sacar con los votos”, indicó.

Desde el Gobierno, Randazzo consideró que “es parte del oportunismo al que nos tienen acostumbrados Massa y el grupo de dirigentes que lo rodea. Es tomarle el pelo a la gente anunciar que van a poner en marcha una reforma que recién empezaría a funcionar en 2023”. Randazzo remarcó que el Frente para la Victoria presentó otro proyecto en 2004 de aplicación inmediata y “el propio Felipe Solá es testigo: en aquel momento los actuales dirigentes del Frente Renovador no decían lo mismo”.

Para el intendente de Morón, Lucas Ghi, el proyecto tiene una “altísima dosis de especulación política”, al tiempo que analizó que pierde valor y posibilidad real” el proyecto, en tanto “hay en las filas del Frente Renovador intendentes que han estado 25 o 15 años” en un municipio. El intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, indicó que “como no hay temas de agenda en los que el Frente Renovador pueda estar en los medios, tira un tema así que a la gente no le interesa ni le modifica”. Su par de Ensenada, Mario Secco, interpretó que este tipo de proyectos “se instalan mediáticamente y luego mueren sin llegar a la Legislatura”.