EL PAíS › EL CASO DE LA DESAPARICION DE LA NUERA DE GELMAN
Para que Batlle responda
El gobierno uruguayo deberá decidir si la amnistía dictada en ese país para los militares acusados de violaciones a los derechos humanos alcanza a los represores implicados en la desaparición de la nuera del poeta Juan Gelman. El juez Gustavo Mirabal rechazó el pedido del fiscal para que archive la investigación sobre la muerte de María Claudia García Irureta Goyena y remitió al Poder Ejecutivo, a través de la Suprema Corte de Justicia, los antecedentes del caso.
El gobierno de Jorge Batlle dispone ahora de 30 días para comunicar al magistrado si el caso de la joven está o no comprendido en la ley de caducidad aprobada en 1986. Mirabal desestimó el pedido del fiscal para archivar la causa al entender que, de acuerdo a la ley, es el Poder Ejecutivo el que debe decidir si continúa o no con el proceso.
María Claudia fue secuestrada en Buenos Aires junto con Marcelo Gelman el 24 de agosto de 1976 y trasladada la segunda semana de octubre de ese año a Montevideo. Allí fue alojada en el Servicio de Información de Defensa (SID) y llevada al Hospital Militar, donde dio a luz una niña. La beba le fue arrebatada y entregada a un policía, quien la inscribió como hija legítima. Una investigación propia le permitió al poeta encontrarse con su nieta; su nuera sigue desaparecida.
La semana pasada, en una visita que hizo el presidente Néstor Kirchner a Uruguay, el canciller Rafael Bielsa aseguró que el Gobierno considera el caso Gelman como “una cuestión de Estado”. Batlle se comprometió a ubicar los restos de la nuera del poeta, reclamo que Gelman le había hecho desde hace tiempo.
Una investigación periodística realizada en Uruguay indicó que María Claudia había sido sepultada en terrenos del Batallón 13 de Montevideo. Batlle, que había formado en agosto de 2000 la Comisión para la Paz, interrogó a notorios represores sobre el tema y llegó a la conclusión de que los restos de la nuera de Gelman estarían en realidad en el Regimiento 14, ubicado también cerca de la capital uruguaya. Sostuvo que el pozo fue cavado por oficiales del ejército uruguayo e hizo saber que quien asesinó a la joven después del parto fue el policía militar de la Guardia Metropolitana Ricardo “Conejo” Medina, quien luego de la dictadura fue secretario privado y amigo del senador oficialista Pablo Millor, integrante de la plana mayor del Partido Colorado.