Cuando todavía falta terminar de definir el acuerdo entre el radicalismo, el PRO y la Coalición Cívica en la provincia de Buenos Aires, el titular de la UCR y precandidato presidencial, Ernesto Sanz, le puso ayer unas fichas a la postulación de la macrista María Eugenia Vidal como gobernadora bonaerense. “El espacio que conformamos tiene a María Eugenia Vidal”, señaló Sanz ante la consulta sobre quién será el aspirante del radicalismo para suceder a Daniel Scioli. El senador mendocino agregó que en su partido analizan sumar al compañero de fórmula de la vicejefa de Gobierno porteño. Para ese cargo hay dos nombres en danza, el intendente de Chascomús, Juan Gobbi, y el diputado alfonsinista, Miguel Bazze, que en su momento se planteaba como eventual candidato a disputar la candidatura en la primaria. El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, que había saltado al massismo, busca ahora competir dentro de este espacio pero ni en la UCR ni el PRO estaban demasiado entusiasmados con la idea.

“La idea es integrar listas para potenciar la alianza que tenemos con el PRO y la Coalición Cívica”, lanzó ayer Sanz, enfrentado con la conducción del partido en la provincia de Buenos Aires liderada por Ricardo Alfonsín. El hijo del ex presidente negocia junto con Bazze los acuerdos provinciales con los referentes del PRO, a pesar de haber rechazado en el acuerdo con el macrismo en la Convención nacional de Gualeguaychú. Tras fracasar su postura e imponerse la de Sanz, la falta de un dirigente competitivo en el principal distrito del país podría dejarlos sin candidato propio.