EL PAíS
Una semana de debates y consulta contra el ALCA
Desde este jueves, cientos de ONG, grupos sociales y de derechos humanos de todo el país se movilizan contra el ALCA y la deuda externa. La consulta popular. El apoyo del Nobel Pérez Esquivel.
“Mientras millones de nosotros luchamos por el pan de cada día y un futuro para todos, otros buscan avanzar con nuevos proyectos de saqueo, sometimiento y muerte.” Esta es una de las consignas de las Primeras Jornadas de Consulta Popular sobre el ALCA, la deuda externa y la militarización, que impulsan en todo el país cientos de organizaciones sindicales, culturales, campesinas, de derechos humanos, religiosas, políticas y barriales. Entre el 20 y 26 de noviembre se realizarán debates y movilizaciones repudiando el ingreso de la Argentina al área de libre comercio que proyecta Estados Unidos, y se espera que más de 2 millones de personas voten en la consulta contra “el plan de dominación geopolítica y estratégica que impulsa la Casa Blanca”. La iniciativa encontró gran eco a nivel nacional y generó marchas, foros de discusión y radios abiertas en Córdoba, Paraná, La Quiaca y Buenos Aires mientras se viven las horas previas al lanzamiento.
Esta convocatoria es el resultado de más de un año de reuniones y asambleas de preparación, y del trabajo que desde abril del 2002 se desarrolla a nivel continental en el marco de la campaña hemisférica contra el Area de Libre Comercio de las Américas. La idea de organizar estas Primeras Jornadas se materializó en la I Asamblea Nacional de Lucha contra el ALCA, que se realizó en agosto del 2002 como parte del Foro Social Mundial Temático en Buenos Aires. Tras ese encuentro nació una campaña masiva de difusión para “informar y estimular el debate y pronunciamiento de toda la ciudadanía, acerca de las consecuencias que este proyecto traería para la vida cotidiana en la Argentina”.
Miles de estudiantes universitarios ya dieron su voto en las urnas distribuidas en las distintas facultades del país para adelantarse a la finalización de las clases y permitir el mayor número de participantes. Pero el día oficial del inicio de la “Autoconvocatoria” será el próximo jueves. En las esquinas simbólicas de la Capital y de las principales ciudades del interior, y en las asambleas barriales que aún quedan en pie, se instalarán mesas en las que “todos los hombres y mujeres del país” se encontrarán con una boleta con tres preguntas sobre si está o no a favor del ingreso al ALCA, del pago de la deuda externa y de la militarización a través de programas como el frustrado Aguila III.
La fecha de inicio de las Jornadas coincide con el Día de la Soberanía Nacional y, a la misma hora en la que todo el país podrá expresar su opinión sobre la posición que debe adoptar la Argentina, se desarrollará en Miami una nueva reunión cumbre entre los ministros de Comercio de la región para supervisar los avances de este proyecto.
Uno de los nombres fuertes que apoyan la iniciativa, entre miles de adhesiones, es el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien días atrás viajó a Washington para llevar hasta el Congreso estadounidense el rechazo de las organizaciones populares argentinas a este proyecto impulsado desde 1994. “El ALCA profundizará el saqueo que han significado las políticas de ajuste estructural, privatización, desregulación y endeudamiento que tanto desempleo y miseria han acarreado en los últimos años”, les dijo Pérez Esquivel a los congresistas locales.
En la Argentina, mientras tanto, las organizaciones que encabezan la convocatoria están realizando un fuerte trabajo de difusión en las calles. “En los últimos días estuvimos parando a la gente para ver cuánto sabía de este tema y nos encontramos en la mayoría de los casos con un interés grande, y aunque vimos alguna heterogeneidad lógica en las opiniones, entre los que se acercan a la propuesta se ve una conciencia antiimperialista”, comentó a Página/12 César Latorre, del MST. “Todos –dijo–, y en especial los más jóvenes, tienen en claro que esto es otro instrumento de Estados Unidos para expandir su imperio.”
“La Argentina se debate entre el hambre y la esperanza de reconstruir un país donde la justicia social y la integración entre pueblos hermanos sean realidad.” “El ALCA amenaza nuestra vida y nuestro futuro.” “Impulsamos el esclarecimiento y el pronunciamiento ciudadano contra el empobrecimiento yel saqueo, y en defensa de nuestra vida y soberanía.” Con estas frases, durante los últimos días marcharon estudiantes en Córdoba y Paraná, y cientos de chicos en Buenos Aires, que entregaron el viernes una carta en la Casa de Gobierno pidiendo al presidente Néstor Kirchner que impidiera el acceso de la Argentina al Area de Libre Comercio.
El objetivo no es impulsar un proyecto de ley por iniciativa popular, ni buscar una salida jurídica. Los organizadores son claros sobre el propósito de la consulta: “Sólo queremos que cuando se tomen las decisiones sobre el ALCA, se tenga bien presente qué es lo que piensa la gente, que creemos que es la presión más válida”.