El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, aceptó las renuncias de su ministro de Gobierno, Javier Oteo, del secretario de Seguridad, Marcelo Churin, y del jefe de Policía, Gustavo Peña, con el objetivo de garantizar la “transparencia” de la investigación del fallecimiento del dirigente social Angel Verón. En una entrevista, Capitanich explicó que consideró convenientes las renuncias “con el objetivo de garantizar la absoluta transparencia, la igualdad de trato y la investigación de carácter judicial, porque el Estado debe ser garante”. “Los funcionarios tienen la obligación de garantizar el debido proceso con la máxima transparencia, como siempre se ha hecho en la provincia. No existe nada para ocultar y en definitiva es necesario que esto se haga”, explicó el gobernador, quien además resultó electo como intendente de Resistencia para el próximo período. Capitanich sostuvo que la dimisión de los funcionarios “es un gesto a destacar, porque entendíamos que es congruente con la calificación de idoneidad profesional de todos ellos y además porque ya estamos ante un traspaso y, en consecuencia, no vamos a nombrar funcionarios sino la cobertura interina de los cargos”.