EL PAíS › GESTIONES OFICIALES POR HADAD Y MONETA
Amistades peligrosas
El secretario de Comunicaciones, Guillermo Moreno, intercedió ante Telefónica por la deuda del Canal 9, de Daniel Hadad y el escribano Raúl Juan Pedro Moneta. El interventor en el Comfer, Julio Bárbaro, aceptó un caballo de regalo de Moneta, cuyo ingreso en el canal
debe legalizar. Según Julio De Vido, se trató de un error de Moreno, a quien describió como apasionado y honesto. No hace falta que dictamine la Oficina Anticorrupción para saber que esas actitudes son incompatibles con la ética pública.
Por Horacio Verbitsky
El secretario de Comunicaciones Guillermo Moreno presionó a las autoridades de Telefónica en favor de Daniel Hadad y del escribano Raúl Juan Pedro Moneta, quienes tienen una deuda de 9 millones de dólares con la empresa española, más otros reclamos cruzados entre ambas partes que quedaron pendientes al cierre de la operación de compraventa del Canal 9 de televisión. Enterado, el presidente Néstor Kirchner se lo recriminó al ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, quien le explicó que Moreno no había solicitado la condonación de la deuda sino su refinanciamiento en un plazo más prolongado. Kirchner le ordenó que hiciera cesar toda gestión al respecto. Consultado para esta nota, De Vido admitió que “pudo tratarse de un error” de su subordinado, cuya honestidad defendió. Esto explica la asombrosa conversión de los ex menemistas Hadad y Moneta, cuyos medios son hoy kirchneristas de la primera hora. De la decisión de Moreno dependen medidas regulatorias que interesan a Telefónica y a los consumidores, por muchos centenares de millones de dólares. Por su parte, el interventor en el Comité Federal de Radiodifusión, Julio Bárbaro, recibió un caballo de regalo del escribano Moneta, luego de una amistosa comida en casa de Daniel Vila, socio del ex ministro José Luis Robo para la Corona Manzano en el canal 2. Se supone que Moneta y Vila-Manzano son competidores. Bárbaro debe decidir en un expediente si autoriza el ingreso de Moneta como socio de Hadad en el paquete acccionario de Canal 9.
Tranquera cerrada
La empresa española vendió el canal en julio de 2002 a un consorcio en el que Hadad tenía como socios visibles a Fernando Sokolowicz y al corredor de negocios del Grupo Meller, Benjamín Vijnovsky. En noviembre de ese mismo año un fallo de la Corte Suprema de Justicia ordenó pagar al Estado 400 millones de pesos a Meller, de donde debían obtenerse fondos para financiar la campaña presidencial de Carlos Menem, cuyos cortos de publicidad produjo Hadad. En el momento de la operación, Hadad&Cía entregaron 3 millones de dólares a Telefónica y se comprometieron a pagar otros 9. La situación se complicó en mayo de 2003: Menem se retiró de la puja electoral cuando todas las encuestas indicaban que no obtendría un voto más que el 24 por ciento que lo había preferido en la primera vuelta y tres semanas después el canal 9 se declaró en convocatoria de acreedores. Desde que Hadad se hizo cargo del canal, la presencia de Moneta fue evidente, aunque recién un año después intentó blanquearla. La operación de compraventa se había hecho “a tranquera cerrada”, es decir que los compradores asumían tanto las deudas como los créditos pendientes de cobro que tuviera Telefónica y ambas partes renunciaban a cualquier reclamo posterior. Telefónica y su socio australiano, Prime, habían pagado 140 millones de dólares en 1999 al anterior propietario, Alejando Romay. La diferencia entre ambas cifras se debe al decaimiento del mercado, a la urgencia de la operación y a las deudas que Hadad y los suyos asumieron. Entre ellas había unos 70 millones de dólares por material fílmico adquirido a los principales estudios. Hadad y Moneta pretenden que Telefónica se haga cargo de algunas de esas deudas. También intentan convertir los 9 millones de dólares de saldo del precio en segundos de publicidad.
Predisposición
Hadad viajó a España, donde se entrevistó con el presidente de Telefónica, César Alierta, designado por el ex presidente José María Aznar y confirmado por el actual, José Luis Rodríguez Zapatero. Luego del encuentro, en el que consiguió una media palabra, publicó en su diario Infobae un artículo en el que Alierta aparecía como el más sagaz empresario contemporáneo. Los españoles estaban dispuestos a considerar alguna de las pretensiones de Hadad y Moneta, reforzadas por el pedido del Secretario de Comunicaciones. Desde ese cargo, del que depende la Comisión Nacional de Comunicaciones, Moreno es el regulador de la actividad que constituye la fuente principal de las utilidades de Telefónica. Hadad y Moneta necesitan cerrar el acuerdo con la empresa española antes del 28 de febrero, cuando se realizará la asamblea de acreedores. Telefónica es el principal, con el 40 por ciento del concurso. La quita que los españoles estén dispuestos a hacer se impondrá luego como un hecho consumado a los acreedores minoritarios. Pero el acuerdo se complicó cuando Hadad y Moneta intentaron contratar al principal generador de audiencia de Telefé, el animador Marcelo Tinelli, con quien abrieron negociaciones para que deserte del canal 11. Para financiar el pase de Tinelli de un canal a otro, Hadad y Moneta obtuvieron entre 8 y 10 millones de pesos aportados por el principal accionista del banco Macro y presidente de la asociación de banqueros, ADEBA, Jorge Brito.
Las licencias
En los registros del COMFER la empresa titular de la licencia del Canal 9, Telearte SA, está compuesta en un 1 por ciento por HFS Media SA (Hadad, Sokolowicz y Vijnovsky) y en un 99 por ciento por Prime Argentina SA. Prime a su vez está integrada en un 99 por ciento por HFS Media SA y en un 1 por ciento por Hadad. El año pasado se abrió el expediente 1457/03 en el que se tramita la autorización para ceder parte de las acciones. De aprobarse, resultaría una asociación en partes iguales entre HFS Media SA y República Media SA (Moneta y su esposa, Claudia Arroyo Benegas). En HFS Media sigue figurando Sokolowicz y, según explicó Bárbaro ante una consulta para esta nota, no ingresó ninguna solicitud para darlo de baja. “El único pedido que tenemos es el de ingreso de Moneta”. El departamento contable, que lo está evaluando no supo explicar las condiciones económicas de la operación, pese a que la ley de radiodifusión reclama la justificación del origen de los fondos. Hace seis meses, en un reportaje publicado en el semanario .23., Bárbaro adelantó su opinión sobre la incorporación de Moneta: “Es de los nuestros”. A su juicio, “lo importante es que los medios sean nacionales”. Con ese mismo discurso pseudonacionalista berreta, Bárbaro, Manzano y Miguel Angel Toma fundamentaron hace 15 años la alianza del menemismo con Bunge & Born. El acercamiento con Moneta fue propiciado por Manzano, que es el abrepuertas político del grupo. De la comida en casa de Vila, además de Bárbaro y Moneta participaron Manzano y el accionista mayoritario del canal 2, Carlos Avila. Tanto el canal 2 como el 9 están en convocatoria de acreedores, lo cual es causal de extinción de la licencia, según el artículo 53, inciso c, de la ley 22.285 vigente. Además, entre los requisitos personales para poseer una licencia figura la constitución regular de la sociedad, la calidad moral de sus integrantes y la demostración sobre el origen de los fondos. La licencia es indelegable y no pueden cederse acciones sin autorización del COMFER.
Papeles
La venta del canal 9 en 2002 obedeció a una exigencia del COMFER a Telefónica, durante la presidencia interina del senador Eduardo Duhalde, ya que la ley no permite que un mismo propietario posea dos televisoras de alcance nacional. Telefónica también es el principal accionista de la licenciataria del canal 11, Televisión Federal, o Telefé. Intimada a desprenderse de uno de los medios, escogió conservar el canal 11, que desde hace años encabeza las mediciones de audiencia y de facturación, y desprenderse del 9, que compite con el canal 2 por el último lugar entre los privados.
Todas las licencias originarias se otorgaron por quince años, renovables por otros diez. Durante la presidencia de Carlos Menem se renovó la del canal 9 (el primero que se privatizó, cuando todavía gobernaba Raúl Alfonsín). La licencia del canal 2 vencía en diciembre de 2002. Avila asoció con ese propósito a Manzano. “En esta selva necesito protección”, se justificó. A cambio de la renovación, Manzano ofreció la cabeza de varios periodistas que molestaban a aquel gobierno. Antes de dejar el gobierno, Duhalde preparó un decreto para renovar en forma automática por veinte años las licencias de los cincuenta canales de aire del país. Pero Kirchner dispuso que las renovaciones serían sólo por diez años y luego de un análisis caso por caso. Las que concedió son las de los canales 11, de Telefónica, y 13, del Grupo Magneto-Clarín, los únicos con una situación económica y accionaria regular. La del 11 se renovó la semana pasada, luego de un diálogo en Madrid del jefe de gabinete Alberto Fernández con Alierta. Consultado para esta nota, De Vido atribuyó a un error la gestión de Moreno en favor de Hadad y Moneta. Dijo que su colaborador era un hombre apasionado y honesto y defendió su desempeño en la rescisión de los contratos con el Grupo Macri por el Correo y con Jorge Neuss por el control del espacio radioeléctrico, que Menem había adjudicado a Thales Spectrum. En la causa iniciada por denuncia de la Oficina Anticorrupción se investiga el pago por parte de Thales de coimas por 25 millones de dólares al ex presidente y a miembros de su gobierno. El propio De Vido se mostró en público en la misma actividad recreativa que Moneta el mes pasado, durante el 6º Concurso Internacional de Saltos Hípicos CSIO-W, que se realizó en el Haras El Capricho, de Capilla del Señor. Participaron los mejores jinetes y caballos de Europa y América. El Concurso es organizado por la Federación Ecuestre Argentina, que preside el directivo de Telecom Gerardo Werthein, y otorga puntos para el campeonato mundial. Este año concurrieron las autoridades de la Federación Ecuestre Internacional, entre ellas su presidenta, la Infanta Pilar de Borbón, hermana del Rey Juan Carlos de España. Las fotos de la infanta de Borbón con Moneta, con el vicepresidente Daniel Scioli y con De Vido se publicaron en la revista que edita Moneta con el mismo nombre de su banco offshore, El Federal. Así como fracasó con Kirchner en la basílica de Luján, Moneta tampoco consiguió retratarse junto con De Vido, pese a que llevó sus propios fotógrafos al haras de los Werthein. Las exhibiciones de destreza equina han sido uno de los recursos de relaciones públicas de Moneta. Su espectáculo de caballos que bailan el tango le permitió acercarse al ex presidente norteamericano Bill Clinton, cuando visitó la Argentina en 1997. Cuando le preguntan por Moneta, el jefe de gabinete, Alberto Fernández, suele explicar: “Mi límite es Hadad”. Como si fuera poco.