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“Hay que diferenciar entre un representante adecuado de los intereses de América latina y un representante excluyente de la región. Si la discusión es ésta, es un mal punto de partida. No puede haber un representante excluyente de la región. Los liderazgos se consensúan, no se exigen. Esto implicaría un padrinazgo que no podemos aceptar.” La frase pertenece al canciller Rafael Bielsa, y referencia un tema que abordó juntamente con su para mexicano, Luis Ernesto Derbez: la oposición a que Brasil ocupe un sitio permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU, tras una hipotética reforma del organismo.
La andanada, producida por ambos cancilleres, se efectuó en una rueda de prensa que dieron el argentino y el mexicano luego de finalizar la primera jornada del Foro “México-Argentina: Visión y Perspectivas”. El encuentro reunió en paneles a funcionarios, académicos e intelectuales de ambas naciones y fue inaugurado por Derbez y Bielsa. “Se trata de un ejercicio intelectual, que permitirá enlazar las historias, afianzar los vínculos y avanzar en políticas comunes”, dijo Bielsa destacando que “para muchos argentinos México es la segunda patria”, en alusión a la hospitalidad recibida por los exiliados durante la última dictadura militar. Su par azteca, al dejar inaugurada la jornada, sostuvo que “Argentina es el tercer socio de México, aumentó su comercio en un 44 por ciento en relación a 2004, y en el primer trimestre del 2005, comparado con el año pasado, ya ha superado en un 60 por ciento la actividad comercial”. El discurso público de Derbez dio marco a las conversaciones que durante toda la mañana mantuvieron en privado ambos jefes diplomáticos: la creación de una comisión permanente –similar a la que funciona con Brasil– para reforzar el Mercosur y el diagnóstico sobre el “parate” del ALCA fueron los puntos de coincidencia.
Además, fue notoria la dureza con que ambos cancilleres rechazaron la posibilidad de que Brasil sea miembro permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Paralelamente al encuentro de las delegaciones diplomáticas en el tercer piso, en el auditorio de la Cancillería, frente a la Plaza de las Tres Culturas, se debatía acerca de “Los retos de la democracia”, “Industrias culturales” y “Desafíos y oportunidades para el comercio bilateral”.
“Hay una decisión estratégica de jerarquizar la relación diplomática con México”, dijo el canciller Bielsa en la apertura del Segundo Foro que convocó, además de funcionarios de ambas naciones, a legisladores y académicos que debatieron sobre las relaciones bilaterales, en diferentes planos. El ex vicepresidente Carlos “Chacho” Alvarez fue el primer expositor del panel “Retos de la democracia en America Latina”, en el que expuso sobre los motivos de la existencia de lo que llamó “democracias de baja intensidad en la región”. Alvarez sostuvo que “el desapego a la ley, la crisis de representación política y la falta de modelos económicos sustentables” son los que generan ese contexto en el que “fracasan los gobiernos”. A su turno, el investigador mexicano Jorge Schiavon aportó estadísticas que emparentaban la realidad de ambas naciones.
En la pausa que se hizo a mediodía, Bielsa y Derbez recibieron a la prensa. Allí el canciller mexicano confirmó que “en agosto estará funcionando a pleno la comisión bilateral que hemos creado”. Bielsa, en tanto aprovechó para hacer público uno de los temas que mayor tiempo insumió en las conversaciones; la relación con Brasil y la coincidencia estratégica en que no haya “un miembro excluyente de la región”.
En el diálogo privado, Derbez había sido especialmente enfático en abordar posiciones comunes en los foros internacionales, en clara alusión a la situación creada en torno de Brasil y su posible incorporación al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas: “No es un combate entre naciones, esmantener la posición que históricamente expresaron nuestros dos países y que fue compartida por las naciones latinoamericanas. Estamos hablando de la crítica al poder de veto, y de la formación de un grupo parroquial permanente”, sostuvo el mexicano. “No podemos aceptar un padrinazgo, los liderazgos se consensúan, no se exigen”, redobló la apuesta Bielsa, que ante una pregunta de un periodista local habló también del resonante secuestro del director técnico del Cruz Azul, el argentino Rubén Romano: “Si ocurriera –Dios no lo quiera– que el centro delantero Jared Borghetti –que tantos dolores de cabeza nos ha dado– sufriera un secuestro extorsivo, como en el derecho penal rige el principio de territorialidad, actuarían las fuerzas de seguridad argentinas. En este caso de Romano corresponde que actúen las fuerzas de seguridad mexicanas”, respondió Bielsa.