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El presidente de la Unión Industrial Argentina, Héctor Méndez, criticó a la conducción económica y reclamó que “el Estado no intervenga en la regulación de precios”. Las declaraciones, un reflejo de la interna que persiste al interior de la entidad fabril, fueron consideradas “un desatino” por miembros del equipo económico y rechazadas por el grueso de la dirigencia industrial, que insistió en considerar el encuentro con Roberto Lavagna como “excelente”, casi un acto de comunión.
En las declaraciones realizadas por Méndez en una conferencia de prensa posterior al almuerzo compartido entre los industriales y Roberto Lavagna, quien fue acompañado por el secretario de Industria, Miguel Peirano, y el subsecretario Pyme, Federico Poli, entre otros funcionarios, Méndez no ahorró referirse a casi todos los puntos que irritan a Economía. “Así como nosotros decimos que el Gobierno no debería intervenir en la cuestión de los salarios, creemos que tampoco tiene que intervenir en los precios”, afirmó el dirigente. Desde “una postura empresaria”, aclaró, “mi tarea es defender el principio de no intervención del Estado en la economía”. En la misma línea agregó que mientras desde la devaluación “los salarios aumentaron por encima del 100 por ciento, los precios lo hicieron el 63 por ciento”. También que “es injusto que el peso de los incrementos de la energía recaiga en el sector industrial”. Ambos factores, salarios y energía, “presionan sobre los costos y cuando se traslada a precios aparecemos como responsables”, manifestó.
De esta manera, Méndez reprodujo la misma línea de argumentación con que las usinas lácteas justificaron los aumentos de la semana pasada y que dieron lugar a la suba de las retenciones sectoriales. El mismo razonamiento fue expresado durante el almuerzo por el presidente de la cámara que agrupa a la industria alimentaria (Copal), Alberto Alvarez Gaiani, y motivó una réplica de Lavagna, quien explicó al empresario la influencia que cada punto de inflación tiene en materia de distribución del ingreso y la pobreza. El ministro también aseguró que “es potestad del Estado” adoptar las medidas necesarias para evitar las alzas de precios.
Un funcionario del Ministerio de Economía dijo a este diario que las declaraciones de Méndez fueron “un desatino”. Recordó que fue la propia UIA quien abogó, durante la gestión de Jorge Remes Lenicov en Economía y Duhalde en la presidencia, por la aplicación de retenciones, no sólo como instrumento recaudador sino especialmente de control de precios internos. En Economía creen también que las declaraciones de Méndez respondieron al peso de la Copal dentro de la entidad, pero están lejos de representar el pensamiento mayoritario de la central empresaria.
Otro funcionario del equipo de Lavagna fue más allá. Aseguró que Méndez “no entiende cómo se fijan las reglas de juego en materia económica”. “El Estado no está fijando los precios, sólo interviene con la política fiscal frente a desequilibrios específicos”, explicó. La misma fuente aseguró que los aumentos de salarios sobre los que se quejó Méndez “fueron el resultado de negociaciones del sector privado”. “¿Si no estaban de acuerdo por qué los concedieron?”, se preguntó luego de recordar que los ajustes se produjeron desde una base muy atrasada.
Ante la consulta de este diario, un importante dirigente de la UIA aseguró, en línea con Economía, que la posición de Méndez es en realidad el pensamiento de la Copal. También que el presidente de la entidad fabril había roto el consenso previo de no hacer declaraciones. Al parecer, con sus consideraciones de ayer Méndez sólo se ganó la simpatía de Alvarez Gaiani.
Pero según pudo saber Página/12, también hubo quejas de los productores de medicamentos, quienes dijeron “no estar seguros de que estén dadas las condiciones para invertir”. Lavagna recordó entonces el crecimiento de la economía durante 39 meses consecutivos y la voluntad del Gobierno de sostener el actual tipo de cambio competitivo. Esto dio lugar a que los empresarios mostraran su preocupación por “el regreso de la bicicleta financiera”. “Muchos liquidan exportaciones y en vez de reinvertir se pasan a bonos”, sostuvo un empresario. Lavagna explicó que no volverán a colocarse bonos ajustados por CER y que no se pagarán tasas por encima de las internacionales.
Por su parte José Ignacio de Mendiguren, si bien consideró que las declaraciones del titular de la UIA no reflejaban el pensamiento industrial, se mostró comprensivo con su colega. “El habló desde su rol de empresario”, justificó. Sobre el almuerzo con los funcionarios de Economía, el ex ministro de la Producción de Eduardo Duhalde aseguró que “fue excelente y elogiamos la política del Gobierno”.