EL PAíS › KIRCHNER EN EL CALAFATE, DELIBERANDO
Asado y gabinete
Néstor Kirchner pasó su segundo día en El Calafate sin adelantar información ni dar indicios sobre el gabinete que lo acompañará a partir de diciembre. Acompañado por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, Kirchner se dedicó a pasear por los jardines de su residencia El Sauce, frente al lago Argentino. Además de caminar, compartió un asado con Fernández, su esposa y su hijo Máximo en el quincho de su vivienda, que no está terminada. Mientras los comensales degustaban la comida, un grupo de periodistas hacía guardia en la puerta de entrada. Kirchner no se preocupó demasiado. Impasible, se dedicó a analizar el futuro de su administración. Aunque ayer sumó una preocupación a su agenda de fin de semana: consultó las novedades de la Legislatura porteña, donde el lunes se decidirá si se le inicia o no el juicio político al jefe de Gobierno, Aníbal Ibarra.
Quien se encargó de recibir la información de Buenos Aires fue, como no podía ser de otra manera, el jefe de Gabinete. Durante todo el día hizo y recibió llamados desde su celular. Entre otros temas, consultó sobre las novedades del proceso que la Legislatura le inició a Ibarra por el incendio de República Cromañón. Al atardecer, Kirch-ner y Fernández retornaron al interior de la vivienda y tomaron un aperitivo con la primera dama y el hijo mayor del Presidente. No se los vio por allí al titular de la SIDE, Héctor Icazuriaga, ni al secretario legal y técnico, Carlos Zannini, que también participan de la “mesa chica” de las decisiones K.
Con algún intervalo deportivo, para mirar el partido de Argentina-Inglaterra o para jugar un picadito, Kirchner no salió de su casa en toda la jornada. A su mujer también se le notó cierto perfil deportivo: recorrió el parque vestida con jogging y en estos días se preocupó porque llegaran a El Calafate los equipos para hacer gimnasia que usa en la quinta de Olivos. Se sabe que, en la residencia presidencial, el Presidente suele correr en la cinta mientras observa los canales de noticias y consulta resúmenes informativos.
En ese clima entre anodino y absolutamente hermético, la cúpula del Gobierno se negó a dar cualquier tipo de información sobre los inminentes cambios del gabinete. En Buenos Aires, mientras tanto, siguieron los rumores sobre los posibles cambios: a la (cada vez más fuerte) versión de que el quilmeño Aníbal Fernández cambiaría Interior por Defensa se sumó ayer otra especulación sobre el futuro de la SIDE. Al organismo de Inteligencia, hasta ahora encabezado por Héctor “Chango” Icazuriaga, podría desembarcar el actual secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.
Neuquino, amigo de Kirchner desde hace muchos años, Parrilli es uno de los hombres de más confianza del Presidente. Esa condición lo ayudaría a asumir el organismo de Inteligencia, donde los jefes de estado suelen designar a sus hombres de más confianza (basta recordar, por caso, a Fernando de la Rúa y su amigo y vecino de Villa Rosa, el banquero Fernando De Santibañes).