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El ministro del Interior, Jorge Matzkin, se reunió ayer con los representantes de los partidos políticos con representación parlamentaria para consultarlos sobre los cuatro proyectos de decreto a través de los cuales el Gobierno reglamentará las elecciones. Aunque hubo acuerdo en casi todo, la obligatoriedad o no de las internas generó controversias: mientras que el ARI reclama que se excluya a aquellas fuerzas que consensúen sus candidaturas, el resto cree que deben ser obligatorias para todos.
Eduardo Duhalde anticipó hace más de un mes el nuevo calendario electoral, que incluye internas en noviembre y elecciones en marzo, pero hasta el momento no ha convertido el anuncio en un decreto formal. Como paso previo, ayer Matzkin se reunió en la Casa Rosada con el representante del PJ, el gobernador pampeano Rubén Marín; los de la UCR, Angel Rozas y Walter Ceballos; el gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, que se acercó en nombre de los partidos provinciales; y el diputado Rafael Romá, que representó al ARI. Luis Zamora, de Autodeterminación y Libertad, prefirió no asistir a la reunión.
En el encuentro, el ministro del Interior repartió copias de los borradores de los decretos elaborados por su cartera. Son cuatro, que reglamentan la ley de internas abiertas y simultáneas y la convocatoria a elecciones generales.
Según explicó ayer uno de los participantes, no hubo definiciones contundentes porque la idea era consultar a los referentes de las fuerzas políticas antes de tomar una decisión definitiva. Hubo, de todos modos, un desacuerdo bastante concreto en torno de la obligatoriedad o no de las internas abiertas de noviembre.
Aunque la ley habla de internas abiertas para todo el mundo, el borrador del decreto reglamentario preveía, razonablemente, excluir a aquellas fuerzas políticas que acuerden sus listas. Este era uno de los reclamos del ARI: Elisa Carrió será la candidata a Presidente y, como es una fuerza nueva, sin grandes aparatos y con vocación para construir una “nueva política”, descartan la posibilidad de convocar a internas para definir otras candidaturas.
Sin embargo, en el encuentro de ayer los dirigentes del resto de los partidos sugirieron que las internas deben ser obligatorias para todos, incluso para aquellos que hayan consensuado sus candidatos. El argumento es que, de otro modo, la estructura ociosa de un partido podría volcarse a influir en la de otro. Un argumento que sería lógico si no fuera por un detalle: todo indica que los partidos que convocarán a internas serán la UCR y el PJ, los únicos con aparatos importantes. Quien reclama que lo excluyan del proceso es el ARI, sin una estructura fuerte que lo respalde. En conclusión, el reclamo se parece bastante a una jugada para erosionar las chances de Carrió.
En cualquier caso, el tono de la reunión fue amable y no hubo definiciones concretas. Cada uno se llevó copias de los proyectos y prometió devolverlos a principios de la semana que viene, con algunas sugerencias.