El dirigente piquetero Luis D’Elía tendrá que explicar ante la Justicia en qué basa sus sospechas de que la derecha israelí tuvo relación con el ataque a la AMIA. Esa fue la teoría que expuso al hablar el domingo último en la Feria del Libro y que motivó su citación como testigo por orden del fiscal Alberto Nisman tras recibir un pedido de Familiares de las víctimas del atentado. El ex funcionario deberá presentarse el martes a la mañana.

“Si este hombre tiene algo que aportar, lo tiene que decir en la causa, y de esa forma colaborar y dejar de hacer diatribas en cualquier medio”, se quejó Pablo Lanusse, abogado de la agrupación de Familiares y Amigos de las víctimas del atentado a la AMIA. Aclaró, de todos modos, que entiende que “hay muchos elementos para presumir que” lo que dice D’Elía “es humo”. “Si no sabe, que se calle”, pidió.

Lanusse le reclamó a Nisman –a quien el juez Rodolfo Canicoba Corral delegó la investigación sobre el atentado– que citara al piquetero para que explique lo que se supone que conoce bajo juramento. El fiscal hizo lugar al pedido. Los familiares ya preparan un listado de preguntas, según dijo el abogado.

El fin de semana pasado D’Elía participó en la Feria del Libro de una conferencia convocada por la Organización Islámica Argentina. Allí sostuvo que “la hipótesis ‘Irán-Estado Terrorista’ no tiene destino” y advirtió: “Habría que tener la valentía de investigar a la derecha política israelí, la misma que asesinó a un grande de la historia de Israel que es Yitzhak Rabin”. “Este atentado, ¿no tendrá algo que ver con aquel cruel asesinato? Algunos creen que no y otros creemos que por ahí sí”, dijo. En el momento se armó tumulto y se escucharon insultos. Después, plantearon su rechazo instituciones de la colectividad judía y también el gobierno nacional, a través del candidato a jefe de Gobierno porteño, Daniel Filmus, que expresó un “total desacuerdo”.

Esta no es la primera vez que D’Elía sale en defensa de Irán. De hecho, fue desplazado del gobierno después de que respaldara al ex presidente iraní Alí Hashemi Rafsanjani, acusado por Nisman como autor intelectual del ataque a la AMIA junto con otros ex funcionarios de ese país. Cuando salió el pedido de captura de Interpol contra ese grupo de acusados, el piquetero visitó la embajada iraní en Buenos Aires y luego incluso viajó a Irán. Acusó al fiscal de orientar la pesquisa según la hipótesis de la CIA y el Mossad.

La inquietud de los Familiares tiene otra arista: pidieron que se investigaran supuestas reuniones del fiscal Marcelo Martínez Burgos –colaborador de Nisman en la causa AMIA– con representantes de los iraníes que tienen pedido de captura, algo que sería incompatible con su función. “Queremos que se investigue a fondo, porque hay que determinar si fue sólo una reunión o si hubo pedidos o algún tipo de ofrecimiento”, señaló Lanusse.

En Estados Unidos, la directora del Comité Judío Americano, Dina Siegel, se sumó a las quejas sobre D’Elía. “Conocemos muy bien su trayectoria desde la época de la guerra en el Líbano y sus permanentes manifestaciones, que no son de crítica sino difamatorias”, advirtió.