Ocho puntos separan a Mauricio Macri de Daniel Filmus en el ballottage, según una encuesta de OPSM, que dirige Enrique Zuleta-Puceiro. El líder de PRO tiene 48,8 por ciento contra 40,9 del candidato kirchnerista. Un 3,8 votará en blanco o impugnará, mientras que otro 4,8 se mostró indeciso. Un 46,9 por ciento de los porteños cree que el próximo jefe de Gobierno será el empresario, mientras que otro 38,8 considera que quien ganará es el ministro de Educación. La mayoría de los encuestados ven al diputado como quien tiene más condiciones para liderar la oposición.

Los datos surgen de entrevistas telefónicas tomadas el 4 y el 8 de junio sobre 600 casos, respetando las proporciones por edad, género y clase social. Según el estudio, el 32,2 por ciento de los entrevistados contestó que Macri sería el líder de la oposición después de esta elección, mientras que otro 30 ve en ese lugar al candidato a presidente de Una Nación Avanzada (UNA), Roberto Lavagna. La dirigente de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, sólo obtiene un 15,8, mientras que el titular de Recrear, Ricardo López Murphy, es visto como el más capacitado por el 9,1 de los porteños. Sobre el resultado de la elección, Jorge Telerman fue elegido por el 35,1 como el “gran perdedor”, seguido de cerca por Elisa Carrió, con el 33,4. La mayoría –un 60,2– observó que el “gran ganador” fue Macri.

La encuesta no reflejó la imagen negativa actual de Macri, pero preguntó cuál cree que es la principal causa para no votar al empresario. Un 34,9 respondió que es “la referencia a su relación pasada con el ex presidente Menem”, mientras que el 23,1 dijo “las negocios de su padre, Franco Macri, con el Estado” y un 10,4 mentó su inexperiencia política.

Un abrumador 73,5 de los consultados opinó que Macri hizo bien en presentarse como candidato a jefe de Gobierno, contra un exiguo 5,4 que lo prefería en la carrera por la presidencia. En tanto, un 59,3 consideró que el presidente Néstor Kirchner no debe involucrarse en la elección de la Capital, mientras que otro 39,6 opinó que debe incidir activamente.

Con el ejemplo de lo que ocurrió en 2003 –cuando Aníbal Ibarra revirtió el resultado de la primera vuelta en la segunda–, un 40,8 aseguró que es imposible que eso se repita, en tanto que un 13,1 lo vio como poco posible y otro 32,7 lo consideró posible. Sin embargo, el 69 por ciento advirtió que es necesaria una segunda vuelta, contra un 28,9 que interpretó que la diferencia es demasiado amplia para que haya ballottage.

En el cuarto oscuro

¿A quién votará usted en esta segunda vuelta para elegir jefe de Gobierno?