Viernes, 14 de diciembre de 2007 | Hoy
El subsecretario para la región, Tom Shannon, buscó quitarle condimento político al caso del maletín. Lo mismo hizo la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires. Para el Departamento de Estado, “no es un tema de las relaciones entre Estados Unidos y Argentina”.
El gobierno de George Bush salió a reforzar su versión sobre el episodio de la valija de Antonini Wilson, que incluye la denuncia de que el dinero sería usado para financiar la campaña de Cristina Fernández de Kirchner. Varios funcionarios de la administración estadounidense se ocuparon del tema, entre ellos el subsecretario adjunto de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Thomas Shannon. “Nuestro Departamento de Justicia tiene una investigación contra varios individuos por una violación de las leyes”, afirmó. Según Shannon, se trata de “un caso policial” en el que se busca “aplicar las leyes dentro de Estados Unidos”. Lo mismo dijo el portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack. “Este no es un tema de relaciones entre Estados Unidos y Argentina. Esta es una cuestión de aplicación de las leyes estadounidenses en Estados Unidos”, aseguró.
Las respuestas de los funcionarios estadounidenses se conocieron pocas horas después de que Cristina Kirchner usara el atril de la Casa Rosada para denunciar una “operación basura” en contra de su gobierno. Shannon hizo esa declaración en Brasilia (ayer participó de una reunión con diplomáticos brasileños para debatir proyectos de cooperación, como los biocombustibles) en una conferencia de prensa. Shannon sucedió en el cargo a Roger Noriega, considerado un duro dentro de la administración de Bush. Hasta hace unos días, Shannon tenía previsto viajar en enero a la Argentina. Al menos eso habían deslizado varios funcionarios estadounidenses. Pero la visita parece haber entrado en un compás de espera.
Además de Shannon y McCormack, también se refirió al tema la vocera de la Embajada de Estados Unidos en Buenos Aires, Mara Tekach. “Es una cuestión legal que maneja el Departamento de Justicia”, dijo. Cuando se la consultó por el momento de la detención de los cuatro supuestos sospechosos de presionar a Antonini (la captura se produjo el lunes a la noche, el día de la asunción de CFK), la vocera respondió que “el timming de las detenciones respondió a necesidades del proceso y a las acciones y el proceder de los detenidos”. “Los fiscales federales están trabajando en forma independiente. Esto no tiene nada que ver con las relaciones bilaterales entre los Estados Unidos y la Argentina”, aseguró Tekach.
La vocera del embajador Earl Anthony Wayne se refirió luego a la posibilidad de que Shannon visitara a la Argentina. “No he escuchado nada de eso”, desmintió. La postergación de la llegada de Shannon sería una nueva señal de enfriamiento de la relación bilateral. Hasta ahora, y a pesar de los pronósticos que auguraban un acercamiento con el recambio entre Néstor y Cristina, los indicios parecen ir en sentido opuesto. En el Gobierno no pasó desapercibido que Bush envió a la asunción de CFK una representante de segunda línea. Se trató de la secretaria de Trabajo, Elaine Chao. Ni la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, ni los de Comercio y Tesoro fueron de la partida. Alegaron “problemas de agenda”.
También salió a hablar del tema el presidente del subcomité para el Hemisferio de la Cámara de Representantes, Eliot Engel. Demócrata y electo por la ciudad de Nueva York, Engel dijo que “no le sorprendían” las novedades de la investigación del FBI. “No me sorprende. Sabemos que Chávez ha utilizado fondos en toda América latina para intentar influir en elecciones”, dijo. Engel se reunió ayer en Washington con el vicepresidente de Colombia, Francisco Santos. Cuando salió de esa entrevista le preguntaron por el caso de Antonini Wilson. “No me sorprende. Asumo que esto iba a pasar”, dijo sobre la denuncia del fiscal federal adjunto de Florida, Tom Mulvihill, quien aseguró a la prensa que el destino de los 800 mil dólares era financiar la campaña de CFK.
Ayer, entre las voces del kirchnerismo, todas fueron críticas hacia el gobierno de Bush, hubo algunas declaraciones que distinguieron entre republicanos y los demócratas. En sus últimas visitas a Nueva York, CFK se preocupó por estrechar lazos con el partido de Hillary Clinton. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, es demócrata. Cristina tiene buena relación con la presidenta del Consejo de las Américas, Susan Seagal, dirigente empresarial cercana a los demócratas.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.