“El homenaje se lo hicimos en vida, que fue cuando se lo merecía, en la Casa de Gobierno.” La Presidenta se enteró de la muerte de Raúl Alfonsín en la capital británica. Eran las 20.40 cuando su esposo, Néstor Kirchner, la llamó a Londres para informarle del fallecimiento del ex presidente. Poco después, y en declaraciones a la televisión, CFK dedicaba sus primeras palabras públicas a Alfonsín. En medio de la congoja y el respeto, la mandataria no pudo ocultar cierta tranquilidad por haber organizado, por iniciativa suya, un acto en honor a Alfonsín en el Salón de los Bustos de la Casa Rosada, donde se descubrió una estatua de mármol en homenaje al legendario líder radical. “Era un hombre con convicciones. Muchas veces con diferencias con nosotros, pero con muchas convicciones. Eso es lo que es digno de respetar”, dijo anoche la Presidenta.

La Presidenta recordó el rol que jugó Alfonsín en la transición post-dictadura y en el retorno de la democracia de 1983. “Su figura está indisolublemente vinculada a la recuperación democrática de la Argentina luego de la dictadura más trágica que tuvimos los argentinos”, aseguró. “Era un hombre que defendía a rajatabla sus convicciones. Eso es algo muy valorable”, agregó. La mandataria luego dio detalles de cómo se organizó el homenaje en el Salón de los Bustos. Consultada por los periodistas que la acompañan en Londres, donde participará de la cumbre del G-20, CFK contó cuál fue la reacción de Alfonsín cuando ella lo visitó en su famoso departamento de la avenida Santa Fe. “Alfonsín me dijo que si íbamos a hacer en vida una cosa así. Yo le dije que por supuesto. Soy de las que creen que a la gente hay que rendirle homenajes en vida, y él, aunque no quería y se negaba, finalmente entendió que era un homenaje que le estábamos haciendo y que no era una alabanza o personalismo”, afirmó.

La Presidenta contó que el Ejecutivo había firmado un decreto para declarar tres días de duelo. Como CFK estaba de viaje, el firmante fue Julio Cobos, vicepresidente en ejercicio de la presidencia. El decreto, que lleva el número 250, también fue firmado por el ministro del Interior, Florencio Randazzo. “Se decretaron tres días de duelo, que es lo que corresponde a un ex presidente de la Nación. Estamos poniendo todo a disposición de la familia. Está toda la gente muy acongojada”, señaló CFK. Aunque la Presidenta no lo mencionó, desde el Gobierno se hizo saber que en las próximas horas se está preparando un anexo al decreto, que establecerá la modalidad de exequias de Estado. “Voy a esperar a ver lo que decida la familia de Alfonsín, quiero que ellos tengan absoluta libertad para elegir lo que quieren”, dijo.

La última aparición pública de Alfonsín se produjo justamente en el acto en la Casa Rosada del 1º de octubre de 2008. “Los honores más importantes se los dimos ese día, cuando él pudo presenciar cuando todos colocábamos su busto en la sala de los presidentes argentinos, donde va a quedar para siempre. Es importante que ésa haya sido su última imagen. Como ex presidente y recibiendo los honores de otros”, destacó la Presidenta.