El vicepresidente, Julio Cobos, se acercó ayer al domicilio de Raúl Alfonsín apenas se supo la noticia del fallecimiento y ofreció a su familia el Congreso de la Nación para las exequias. Cobos expresó luego su “profundo dolor” por la noticia. “Hemos perdido hoy a un gran hombre de bien. Se ha marchado en paz el gran defensor de los valores democráticos, de las instituciones y del pueblo argentino. La historia nacional recibe con honores al garante de la democracia”, expresó Cobos, quien ayer se encontraba en uso de la presidencia debido al viaje de Cristina Kirchner a Londres. El vicepresidente afirmó que “Alfonsín nos ha dejado un legado: el respeto por la democracia, los derechos y los valores morales. Será nuestro deber honrar sus acciones, poniendo en práctica día a día su valiosa enseñanza”. Cobos había visitado el lunes a Alfonsín, pero no pudo conversar con él porque en ese momento estaba durmiendo. “No quise despertarlo, estuve reunido con sus hermanos y sus hijos”, comentó.