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por Rosendo Fraga*

El hecho político de 2003 será la elección presidencial, en la que el dato central será que por primera vez en más de un siglo se va a dar una elección sin bipartidismo. El radicalismo se desarticula como alternativa política. Y además esta es también la primera vez en la historia del peronismo en que van a votar divididos entre dos, tres o cuatro candidatos. Esto puede permitir a una coalición de centroizquierda o centroderecha ganar con el 20 o 25 por ciento de los votos y llegar a la segunda vuelta contra un candidato del peronismo. En lo económico, el escenario de 2003 está estrechamente vinculado al resultado de la elección presidencial. La economía se mueve por expectativas y desde comienzo de año estará influida por lo que se crea que va a suceder en la elección. Es muy difícil determinar el escenario económico de 2003. Si gana Carlos Menem, Elisa Carrió, Adolfo Rodríguez Saá, un candidato de Eduardo Duhalde o Ricardo López Murphy, los escenarios económicos serán sustancialmente diferentes. En conclusión, la economía de 2003 va a estar sometida a la incertidumbre de la elección presidencial. Si gana Menem, se prevé un programa neoconservador, con Rodríguez Saá uno populista, si gana el candidato de Duhalde conjeturo que intentará continuar el actual precario equilibrio, no está claro el programa económico de Carrió y López Murphy, como viene sosteniendo claramente, plantearía la prioridad de la reinserción de Argentina en el mundo.
* Encuestador y consultor.