El cura Christian Federico von Wernich presenta una “conducta manipuladora, conflictiva, necesidad de confrontar con el otro como manera reivindicatoria” y “manifiesta ideas persecutorias”, según la evaluación de la psicóloga que lo asiste en el penal de Marcos Paz, bautizado como el “pabellón de lesa”. Otra especialista en psiquiatría lo caracterizó como un paciente “verborrágico” que “despliega ideas de prejuicio” y también destacó su “actitud reivindicatoria”, según consta en su historia clínica. La condena a prisión perpetua fue confirmada por la Corte Suprema de Justicia, pese a lo cual la Iglesia Católica no le aplicó sanción canónica alguna. Sus prejuicios y actitud confrontativa alcanzan a la propia confección de su historia clínica por parte de la División de Asistencia Médica del Servicio Penitenciario Federal. El 28 de enero, el ex capellán de la Policía Bonaerense denunció ante el TOF 1 de La Plata al Director del Hospital del Complejo Penitenciario de Marcos Paz, Jorge Goncálvez, por no haber le entregado copia de su historia clínica en el lapso de 48 horas. La obtuvo el 24 de febrero y en abril reclamó que se le corrigieran 27 presuntos errores (en su mayoría, falta de sellos o datos incompletos) e interpeló a Goncálvez por sus “reiteradas y graves violaciones a la ley”. El 20 de mayo, el Cuerpo Médico Forense, por orden de la jueza federal Martina Forns, dictaminó que la historia clínica “cumple con los requisitos legales de un seguimiento habitual de un paciente ambulatorio”. En 2008 Von Wernich había denunciado a Goncálvez y al cardiólogo Walter Sosa por “abandono de persona” y “torturas psicológicas”, ya que argumentó que no habían atendido como debían su presión arterial y las arritmias que aseguró sufrir. Pero el profesional que le realizó la evaluación cardiológica “no encontró evidencias de los padecimientos mencionados”. En 2009, invocó ese episodio para negarse ser operado en el Hospital del penal. También aclaró que no haría uso de su obra social, PAMI, porque como “preso político” era el SPF el que debía velar por su salud.

Von Wernich, quien difunde periódicos comentarios celebratorios del terrorismo de Estado, fue uno de los firmantes de la solicitud de amnistía gestionada a través del Episcopado católico por los represores detenidos. La reivindicación de su “misión” incluye el bautismo del penal como “Monasterio Cárcel” de Marcos Paz, donde continúa oficiando misa.