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El comunicado que acordaron difundir los ocho ministros de la Corte Suprema intenta mostrar que están analizando las leyes de impunidad, pero que ellos –como siempre– manejarán los tiempos como quieran. Dice, textualmente:
- Que “aún no estando previsto en el temario del día de la fecha, se abordó la cuestión que concierne a la constitucionalidad o inconstitucionalidad de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida”.
- “La Corte –agrega el texto– no es ajena a las opiniones publicadas en los medios masivos de comunicación ni tampoco a las manifestaciones de los otros Poderes Políticos del Estado que atribuyen al tratamiento de estas leyes una trascendencia significativa y, por lo tanto, hace conocer que respecto al tema que nos ocupa continuará abocada a la consideración del caso”.
- En ese sentido señala que el tribunal trabajará “en los tiempos que la misma Corte considere necesarios para que todos sus miembros puedan pronunciarse fundadamente y sin ningún tipo de presión en temas tan trascendentes para la vida política nacional”.
- Aclara, además, que en la reunión de ayer “se trataron todos los asuntos que regularmente se someten a decisión del tribunal” y que sus decisiones “son de público conocimiento y se pueden requerir en la secretaría de jurisprudencia”.