EL PAíS
Una catarata de críticas
- Miguel Bonasso, candidato a diputado nacional (PRD): Acusó a Scioli de “intentar limar el poder del presidente Néstor Kirchner”. “No sé si se va a ir, pero va a quedar aislado en un placard”, pronosticó. “No puede salir a decir que en un país en serio no se anulan las leyes (de Punto Final y Obediencia Debida). Está contradiciendo con una chicana de pésimo gusto el lema de la campaña que lo hizo vicepresidente”, dijo.
- Ricardo Falú, titular de la Comisión de Juicio Político de Diputados: Llamó a Scioli a “no alterar públicamente las políticas que orienta el Poder Ejecutivo” y a que “desmienta categóricamente” cualquier aspiración de generar “un espacio político propio”. “Es su obligación –dijo– aventar tempranamente cualquier profundización de una situación atípica que pretende reinstalarse sin respetar las reglas constitucionales.”
- Aníbal Fernández, ministro del Interior: “Independientemente del pensamiento del vicepresidente, hay una posición de quien diseña las políticas públicas tomadas y, si hay una colisión, hay que desdramatizarla, no tiene más que eso, una discusión respecto de un tema y nada más”, apostó a minimizar la discusión sobre la suba de tarifas.
- Eduardo Di Cola, diputado (PJ): Opinó que Scioli “no tiene legitimidad para interferir en un proyecto de nuevo país que interpreta y ejecuta al presidente Kirchner”. “Que Scioli no se confunda, porque ha sido elegido para acompañar un proceso que encarna y encabeza el Presidente”, alertó.