Jueves, 7 de mayo de 2015 | Hoy
EL PAíS › LA MADRE DE NISMAN Y UN CUSTODIO CONFRONTARON SUS VERSIONES
En el careo convocado por Fein, Sara Garfunkel dijo que la puerta del baño donde hallaron a Nisman muerto estaba totalmente cerrada, mientras que el custodio Armando Niz dijo que la puerta estaba abierta unos 20 centímetros.
Por Raúl Kollmann e
Irina Hauser
La madre de Alberto Nisman, Sara Garfunkel, y el custodio del fiscal Armando Niz se cruzaron ayer en un tenso careo ante la fiscal Viviana Fein y su secretario, Bernardo Chirichela. En realidad, las diferencias entre ellos no eran muy grandes, pero había que aclarar las cosas y, en cierta forma, cada uno de los protagonistas se mantuvo en su posición: Sara Garfunkel dijo que cuando entraron al departamento la puerta del baño estaba totalmente cerrada, mientras que Niz afirma que existía una pequeña luz de unos 20 centímetros. Los dos coinciden en que Niz empujó la puerta, introdujo la cabeza y encontró al fiscal muerto. Luego Garfunkel también se asomó.
Fein ordenó el careo porque mira cada una de las declaraciones para analizar lo que surge respecto de la polémica central: si Nisman se quitó la vida o si fue asesinado. Y en este caso se trata de dos declaraciones importantes porque Garfunkel y Niz fueron las dos primeras personas que entraron al departamento y encontraron a Nisman muerto en el baño. Además, el de Garfunkel es un testimonio muy independiente: no se la puede sospechar de connivencia con los custodios ni con ningún amigo o adversario de su hijo.
Como se sabe, Nisman no contestó los llamados de la custodia durante todo el domingo 18 de enero y, ya por la tarde, esos custodios se comunicaron con la madre del fiscal porque ella tenía las llaves del departamento. Dado que la puerta de la cocina tenía una traba por dentro, convocaron a un cerrajero y, de inmediato, entraron Niz y Garfunkel.
La versión de la madre y el custodio es idéntica y sólo había una discrepancia. Garfunkel afirma que entraron al dormitorio y que ella vio luz por debajo de la puerta del baño. Entonces le pidió a Niz que se fijara ahí. La madre del fiscal sostiene que la puerta del baño estaba totalmente cerrada y que por eso ella vio la luz por la parte de abajo. Niz, en cambio, dice que no tuvo que accionar la manija de la puerta, porque ésta estaba abierta unos 20 centímetros. Igual, contó que empujó un poco la puerta, pero que estaba trabada por dentro por el cuerpo del fiscal. Empujó un poco más y pudo meter la cabeza para mirar. Después lo hizo Garfunkel. Ambos vieron al fiscal muerto.
Fein quiso ver si mediante un careo se saldaba la discrepancia entre puerta cerrada o con pequeña apertura, pero cada uno se mantuvo en lo suyo. También eso le sirvió a la fiscal, porque le permite asegurarse de que nadie pudo salir por esa puerta una vez producido el disparo ya que tendría que haber movido el cuerpo del fiscal desde afuera del baño para apretarlo contra la puerta e impedir el acceso. Es una maniobra imposible si la puerta estaba cerrada o con una apertura mínima por la que no pasaba siquiera un brazo.
Para dar un ejemplo –explicó a este diario un criminalista–, es como dejar una silla apoyada de adentro contra una puerta. Si esa puerta está cerrada o con una apertura mínima, es imposible desde afuera dejar la silla apoyada. En el caso de Nisman, significa que, con la puerta cerrada, nadie pudo manipular su cuerpo para ponerlo contra la puerta, del lado de adentro, como se lo encontró. Es más, si alguien arrastró al fiscal dentro del baño, también se hubiera notado en el piso.
Todo esto implica que Nisman estaba solo en el baño al momento del disparo y, por lógica, que se quitó la vida. Se trata de una evidencia más que va en ese sentido dentro del expediente, aunque deberán analizarse todas las pruebas en su conjunto.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.