EL PAíS
Solá, por Quilmes
En simultáneo con la preocupación de la Casa Rosada (ver nota central), el gobierno bonaerense salió ayer a mostrar una actitud más decidida en relación con la crisis de seguridad que afecta a la provincia. Felipe Solá y su vice, Graciela Giannettasio, interinamente a cargo del área de Seguridad, estuvieron ayer en la sede de la Jefatura Departamental de Quilmes para evaluar el funcionamiento del programa de prevención del delito. Por la tarde, Giannettasio sobrevoló en una avioneta zonas del norte y sur del conurbano para monitorear las tareas de prevención policial.
Al mismo tiempo, la Legislatura bonaerense convocó a una sesión extraordinaria el próximo martes para debatir diversas modificaciones y proyectos de ley, consensuados el viernes en una reunión entre Solá y el titular de la Cámara baja bonaerense, Osvaldo Mércuri, quien le ratificó el respaldo de los legisladores duhaldistas, siempre y cuando el gobernador muestre una actitud más activa. Entre otras medidas, el paquete incluye una iniciativa para reducir los beneficios a los violadores condenados, otra que faculta a la víctima de un delito para que pueda impugnar resoluciones adversas y otra que apunta a agilizar los trámites procesales. Como parte de este paquete, se propondrá reorganizar los mecanismos por medio de los cuales se plantean nulidades, que suelen provocar una acumulación de causas, particularmente las más graves en las Cámaras de Apelaciones.