EL PAíS
La defensa de Baudino
Por A. D.
El correo interno de SW incluía calcomanías, talonarios o folletería. Aunque la línea aérea solo podía enviar “cargas” sin pasajero desde el aeroparque Jorge Newbery, también lo hacía desde Ezeiza con una autorización “oral o una nota o un mail” firmado por un gerente. Eso habría sucedido el 16 de septiembre, cuando el supervisor Claudio Baudino, de 28 años, aceptó embarcar las cuatro valijas sin pasajero hacia España. Esa es la lógica de defensa de Baudino: el abogado Luis Velasco explica que su defendido “sólo cumplió una orden”. El embarque “no fue algo que le haya llamado la atención... porque había una forma de correo interno para personal jerárquico o gerentes de la empresa, que si tenían alguna reunión en Madrid se hacían mandar valijas o bultos”. Aportó “unos 30 mails” en la causa para demostrarlo. Y después del procesamiento como presunto “partícipe necesario con dolo eventual”, la defensa aportó dos testimonios que considera clave.