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El éxito de Pedro Almodóvar en Londres y París no pudo ser más rotundo. El cineasta español cosechó el domingo sendos galardones en las dos únicas categorías en las que competía con Hable con ella en la 54ª edición de los Premios Bafta, de la Academia del Cine Británico. Su doble triunfo, por mejor guión y film en lengua extranjera, remata una brillante actuación, el día anterior, en los premios César franceses (mejor película de la Unión Europea) y refuerza así su carrera hacia el Oscar de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood. El cineasta español ya había ganado un par de estatuillas de los Baftas con Todo sobre mi madre en 1999, pero la respuesta de los británicos en esta ocasión eleva el horizonte de la esperanza de cara a los Oscar. Y es que un alto porcentaje de los miembros de las academias británica y estadounidense tienen derecho a voto en ambos premios, los Oscar y en los Bafta, y Hable con ella –ignorada a la hora de los premios por la Academia del Cine Español– acude también a Hollywood en la categoría de guión original (además de mejor dirección). “Pero, bueno, son dos premios independientes”, recordó Almodóvar, intentando controlar sus sueños. En la ceremonia de la 54ª edición de los Premios Bafta, Almodóvar aprovechó su acceso al estrado para lanzar un emotivo mensaje en contra de la guerra de Irak: “Es importante recordar las recientes y masivas manifestaciones por la paz, especialmente aquí y en España, los dos únicos países europeos cuyos gobiernos están volcados a favor de la guerra”, afirmó.