ESPECTáCULOS
LA FERIA Y YO
Por esther diaz
“Como autora prefiero el silencio del teclado digital, las caminatas solitarias, las incursiones en los escritos de los que me alimento. Como lectora, la visita a librerías en cualquier momento del año. Sin embargo, la Feria tiene otro encanto: su laberinto de estímulos, su festejo de la cultura, su exaltación del libro como protagonista absoluto de un acontecimiento sin fronteras, en un territorio extraño a la escritura y la lectura. Pues ellas requieren soledad, concentración y silencio. La Feria, en cambio, aglutina multitudes, dispersa los sentidos, genera bullicio. Ahí se celebra el libro en su exterioridad, en sus relaciones, en sus ramificaciones. Los textos se expanden en un espacio abierto a la interacción de personas de todas las edades y de múltiples nacionalidades. Hay amantes de la lectura y hay otros que poco leen. Pero ocurre un milagro. Durante la ritual visita al templo de la palabra escrita, todos alientan esperanzas de decodificar símbolos, de arrancar secretos ocultos bajo las portadas, de descubrir maravillas encerradas en papel, de acunarlas, penetrarlas y recorrerlas mediante la lectura que –como la escritura y el amor– suele hacerse en privado.”