ESPECTáCULOS
LA FICHA
Influidos por los mexicanos Teen Tops de Enrique Guzmán, Los Gatos nacieron en 1963 y en Rosario como The Wild Cats, como idea de Ciro Fogliatta. Al tiempo, quedaron huérfanos de cantante –le tocó la colimba– y probaron a un pibe de 14 años para reemplazarlo: Félix “Litto” Nebbia, que le torció al grupo la costumbre de cantar en inglés y castellanizó el nombre. Como Gatos Salvajes, y luego de agitadas tocatas en Rosario, llegaron a Buenos Aires contratados por La escala musical. Ocho recitales por semana, aparición en TV los domingos al mediodía y la grabación de algunos jingles, le otorgaron al grupo cierta popularidad y la posibilidad de debutar discográficamente. El primer registro fue un simple que incluía La respuesta y un tema de Check Berry en castellano (Talkin’ about you), que vendió apenas 480 copias. Y después llegó el primer y único larga duración que alternaba composiciones propias (En tu corazón, Dónde vas, Ruta a go go y Tan sólo un perdedor) con versiones ajenas (Little red rooster, de Willie Dixon, en inglés, y Bajo la rambla, de la dupla Resnick-Young, en español). El grupo se desmembró a fin de año al quebrar La escala musical, y la historia es conocida: Pueblas, Adjaiye y Romero retornaron a Rosario, y Litto y Ciro se quedaron merodeando por La Cueva, de donde surgirían Los Gatos a secas, con Oscar Moro en batería, Alfredo Toth en bajo y Kay Galiffi en guitarra. La balsa estaba a la vuelta de la esquina.