Las causas Macri-Meller fueron el paradigma de la corrupción del gobierno menemista en la década del noventa. De la manera en que el Estado y las empresas contratistas se unían para la corrupción, los negociados y el desmantelamiento de lo público.

Macri-Meller fue la punta del iceberg por la que se llevó adelante el juicio político a la Corte Suprema del menemismo que comandaba Julio Nazareno.

Macri-Meller fueron las dos causas jurídicas, con millonarias pérdidas para el Estado y escandalosas muestras de corrupción, paradigmáticas de una época en la que se desguazó al estado.

Hoy Macri-Meller es el acuerdo para restablecer las multas fotográficas en la Capital Federal.

La empresa que dirige Sergio Meller, quien entabló una estrecha relación con Mauricio Macri a partir de que los dos fueron secuestrados contemporáneamente, pasó de ser un negocio familiar de venta de alfombras a convertirse en testaferro de los intereses del menemismo en la privatización del Estado. Así incursionó en la privatización de Aguas, teléfonos y sistemas de comunicaciones. Así ganó la licitación de las “fotomultas” en la Capital durante el gobierno de Fernando de la Rúa.

Esa licitación caída dos años atrás fue postergada por sucesivos actos de “necesidad y urgencia” mientras se tramitaba una nueva. Pero en julio del año pasado, el gobierno decidió que no habría nueva licitación y dio por terminadas definitivamente las prórrogas. En ese marco, según rezaban los pliegos, solicitó a las empresas que devolvieran los equipos que usaban para las multas, patrimonio de la ciudad.

Las empresas no sólo se negaron sino que comenzaron, como en la causa que se cita al principio, un trámite judicial reclamando otros pagos. La Justicia de la Ciudad dio la razón al gobierno y ordenó que se devolvieran los equipos al Estado dando por finalizada la relación contractual de esas empresas con el Estado.

Mauricio Macri decide ahora en un acto sin ningún basamento legal no sólo recontratar a esas empresas en forma directa sino también aumentarles la tarifa de 6,38 pesos por multa a 11 pesos. No sabemos qué curso seguirá el reclamo que venían haciendo de mayores pagos. ¿O con esta recontratación y este aumento ven saciado ese reclamo?

Resulta difícil entender cómo pueden dos viejos amigos, unidos por algo tan estrecho como un secuestro en común, y por cosas tan mundanas como millonarios negocios en conjunto durante décadas sentarse a discutir seriamente un tema tan sensible como la seguridad vial, mientras uno defiende los intereses de los ciudadanos y el otro la ganancia de su empresa privada. ¿Alguien cree seriamente que esto es posible?

Por suerte, Meller no está solo en la negociación. Su par en la discusión es Itrón, la empresa fundada por Franco Macri de la que Mauricio Macri era presidente en el momento en que ganó la primera licitación para las fotomultas.

* Legisladora porteña (FpV).