La Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires revocó la prisión domiciliaria con la que había sido beneficiado el joven que atropelló y mató a Kevin Sedano en mayo de 2002.

Eduardo Sukianssian, sobre quien el 29 de mayo del año pasado la Cámara de Casación Penal había ordenado al Tribunal Oral Criminal (TOC) 7 San Isidro que revisara el comportamiento del condenado en la unidad carcelaria para otorgarle una morigeración en la pena dispuesta dos meses antes, deberá volver tras las rejas.

El revocamiento de la resolución fue pedido por el abogado querellante y letrado de la Asociación Madres del Dolor, Claudio Mazaira, que la había calificado como “vergonzosa” en aquel entonces.