Más de medio centenar de organizaciones sociales, políticas y sindicales se movilizaron ayer a la Jefatura de Gobierno porteña, para denunciar recortes en los programas de ayuda social y el “vaciamiento” del Instituto de la Vivienda de la Ciudad, y rechazar la política de desalojos implementada desde el Ejecutivo que conduce Mauricio Macri.

La marcha, que se concentró a las 14 en el cruce de Avenida de Mayo y 9 de Julio, culminó una hora y media después frente al palacio municipal, donde los manifestantes cortaron el tránsito durante aproximadamente dos horas. Haciendo sonar bombos, banderas y pancartas pidieron una entrevista con alguno de los funcionarios porteños, que no les fue concedida.

Pablo Spataro, representante de ATE Capital –una de las organizaciones que convocó a la protesta–, informó que pudieron entregar en mesa de entrada el pedido, pero como no fue contestado y las puertas de la sede gubernamental se mantuvieron cerradas con un fuerte operativo policial afuera, decidieron dar 72 horas a la espera de alguna respuesta.

En función de esa premisa, los dirigentes anunciaron que de no ser recibidos el lunes, habrá una nueva marcha, esta vez hasta la casa de Macri o del jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, “para que den la cara y se sienten a discutir las políticas”. Rodríguez Larreta es quien tiene bajo su órbita el manejo del Instituto de la Vivienda de la Ciudad, y el autor de la ya célebre frase: “Despacito y en silencio se van haciendo los desalojos”.

“Nosotros necesitamos que nos den algún tipo de respuesta, estamos hablando de cuestiones que son urgentes y hasta ahora desde el gobierno nadie vino a hablarnos, todas las medidas son unilaterales, despidos, desalojos, cierre de hogares”, dijo el dirigente. Consultado acerca de las medidas a llevar adelante en caso de no ser recibidos por el gobierno porteño, Spataro indicó que “seguirán las protestas hasta tanto los reclamos sean escuchados y nos den respuestas claras, porque esto es algo que venimos diciendo desde mayo”.

Entre las consignas de la marcha, las organizaciones pidieron “tierras y recursos para las cooperativas de viviendas, no al vaciamiento del Estado y de los programas sociales, presupuesto para la emergencia habitacional, suspensión de los desalojos y la reincorporación de los despedidos”, entre otras.

Desde el Comedor Los Pibes, otra de las organizaciones que convocó al reclamo, Leandro Roldán denunció que “35 familias fueron expulsadas de los programas mediante los cuales eran alojados en hoteles de la ciudad, y además se paralizaron las construcciones y la inversión oficial en viviendas”. Al respecto, advirtió que “se hicieron muchos recortes en los planes sociales y es como si Macri quisiera expulsarnos de la ciudad, porque te ofrecen dinero para comprar terrenos en la provincia, es un sistema excluyente”.

Los manifestantes improvisaron frente a la sede de gobierno un escenario con un camión donde algunos de los dirigentes de las organizaciones proclamaron las consignas de la protesta y entonaron cánticos contra Macri y Rodríguez Larreta, a quienes acusaron de irregularidades en el IVC.

Las organizaciones y decenas de familias permanecieron durante dos horas frente al edificio, por lo que la Avenida de Mayo, entre la plaza y Florida, permaneció con el tránsito cortado. Algunos legisladores también participaron de la marcha, como Juan Cabandié y Tito Nenna (legislador electo), del Frente para la Victoria, y Ariel Basteiro, de Proyecto Sur.

Además de ATE, la CTA y el Comedor Los Pibes, estuvieron presentes militantes del Frente Barrial 19 de Diciembre, el Frente Transversal Nacional y Popular, la Mutual Homero Manzi, el Polo Obrero, la Corriente Nacional Martín Fierro y el Movimiento Evita, entre otros.