Antes de fin de año, todos los colectivos de la ciudad de Buenos Aires deberán incorporar un GPS a sus vehículos para monitorear que se cumplan el recorrido y los límites de velocidad. La innovación llega luego de una serie de accidentes de tránsito, con peatones como víctimas fatales en algunos casos, y fue anunciada ayer por el ministro del Interior, Florencio Randazzo. “Habrá un trabajo articulado entre la Comisión de Regulación del Transporte (CNRT) y el Gobierno de la Ciudad para recibir en línea las sanciones”, explicó el ministro al referirse al monitoreo satelital, por el cual se efectivizará el pago de multas a los choferes que violen disposiciones de tránsito. A partir de hoy, ya comenzarán a programarse estos aparatos en algunas líneas de colectivos.

La decisión se tomó por la mañana durante una reunión hecha en el Salón de los Escudos del Ministerio del Interior. Allí concurrieron Felipe Rodríguez Laguens, director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial; Eduardo Sícaro, interventor de la CNRT; Guillermo Dietrich, secretario de Transporte del gobierno porteño, y Matías Molinero, subsecretario de Seguridad Vial de la Capital Federal. En el encuentro se señaló, como factor de los accidentes, que las multas en la mayoría de los casos terminan por no efectivizarse sobre las empresas de transporte.

“Si hay una sanción y esa sanción no se cobra, no tiene el efecto deseado”, dijo Randazzo. Anoche, un vocero de la Agencia Nacional de Seguridad Vial detalló el asunto: “La próxima semana va a haber una transferencia de información. La CNRT le va a pasar la lista de 22 mil choferes habilitados al gobierno porteño, que a su vez debe pasarle todas las infracciones con sentencia firme a la CNRT para que informe a la empresas de colectivos. La idea es que paguen todas las multas”.

Mientras tanto, la Agencia va a aportar los primeros equipos de GPS, que actualmente se utilizan en los micros de larga distancia, en al menos tres líneas de colectivos: 60, 15 y 152. Hoy mismo se comenzaría a “geo-referenciar” los aparatos, es decir, se cargan la traza del recorrido y las velocidades máximas que debe respetar en cada tramo: 40 kilómetros por hora en las calles, 20 frente a un colegio, 60 en las avenidas. El resto de los equipos lo proveerán las empresas de colectivos, que serán subvencionadas por la Secretaría de Transporte de la Nación.

¿Y cómo se cobrarán las multas? “Bueno, es más complejo de lo que la gente piensa, porque estamos hablando de conductores profesionales. Cuando haya una infracción, el sistema de GPS lanzará alertas on line a los inspectores del gobierno porteño, que deben registrar la infracción y comunicarla a la CNRT, el organismo encargado de cobrarlas”, comentó la fuente de la Agencia Nacional de Seguridad Vial. En la reunión de ayer, además de evaluar medidas contra los accidentes protagonizados por colectivos, también se mencionaron otros temas.

Las partes acordaron una pronta y profunda revisión del protocolo psicofísico para obtener el carnet de conductor profesional y en adelante las autoridades del gobierno porteño participarán en calidad de “observadores” de este examen. “Llegamos a un acuerdo para que inspectores se instalen en las cabeceras de las terminales y verifiquen los horarios de los recorridos y el descanso de 15 minutos obligatorio que deben tomar los choferes antes de dar otra vuelta y que casi nunca se cumple”, dijo Matías Molinero, funcionario del gobierno porteño.

También se habló de la realización de estudios sobre estrés y descanso de los choferes. “En la CNRT ya se está haciendo un estudio para determinar en qué momento hay estrés, sea por la carga horaria, la hora pico de tránsito o por las condiciones físicas”, comentaron desde la Agencia. Está prevista otra evalución, agregaron, “que da el punto de vista de los choferes sobre las condiciones laborales y los recorridos, que va a incluir propuestas de ellos”.

Mañana habrá otra reunión en el Ministerio del Interior para seguir analizando el tema con las cámaras empresariales y luego con el sindicato de la Unión de Transporte Automotor. Randazzo explicó que circulan más de 9800 micros por día con 45 mil orígenes y destinos. La semana que viene, 50 inspectores de civil de la CNRT subirán a los colectivos y controlarán, con un GPS manual, la velocidad o si se salen de su recorrido. Tendrán la postestad de parar el colectivo y labrar un acta de infracción, mientras se notificará a las empresas para que identifiquen al chofer para determinar si es o no reincidente.