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El sábado por la noche, una pareja murió al ser atropellada por un colectivo de la línea 500 que de improviso chocó contra el refugio en el que los jóvenes aguardaban el paso del ómnibus, en el partido bonaerense de Florencio Varela. Familiares de las víctimas denunciaron que al parecer se “borraron pruebas” del hecho con la limpieza del lugar. Por el accidente, el conductor de la unidad fue detenido, según informaron fuentes policiales.

El episodio ocurrió alrededor de las 23.30 del sábado pasado, cuando un colectivero de la línea 500, que recorre el distrito de Florencio Varela hasta la estación de Bosques, perdió el control del vehículo, en el cruce de la Avenida Padre Obispo Novak y la calle Cabello, en San Jorge, un barrio de casas bajas, cerca de la ruta provincial Nº 53.

Entonces, el chofer del interno 41 embistió a una garita de cemento y atropelló a una pareja que esperaba allí, a unas 15 cuadras de la estación de Florencio Varela, el paso del ómnibus para dirigirse a un bingo. Las víctimas fueron identificadas como Carlos Alberto Chamorro, de 32 años, y a Nilda Rojas, de 39. Las causas que provocaron esa maniobra del chofer comenzaron a investigarse, informaron fuentes policiales.

El impacto del colectivo provocó el derrumbe de la estructura de la parada de colectivos. “Escuchamos el ruido y, entre los vecinos, intentamos sacarlos de los escombros”, relató un testigo del accidente.

Efectivos policiales y bomberos de Quilmes acudieron al lugar y rescataron los cuerpos de las víctimas de entre los escombros de la garita. Chamorro, padre de un niño, y Rojas, madre de tres, murieron en el acto como consecuencia del choque.

Tras el accidente, Verónica Chamorro, hermana del joven, manifestó: “Nos quedan muchas dudas, pero la principal es por qué limpiaron las pruebas (del hecho) tan pronto”.

La mujer, además, responsabilizó “a la Municipalidad (a cargo de Julio Pereyra) y a la empresa del medio de transporte (30 de Agosto)”. También consideró que el chofer circulaba “muy rápido” con el colectivo. “Ahora, los chicos de ella quedaron sin madre y mi sobrino sin padre”, dijo la hermana del muchacho fallecido.

La joven, por otra parte, señaló que los jóvenes “salían desde hace poco tiempo”, y después precisó que su hermano, Carlos Chamorro, “decía” que su pareja “era una chica buena”. Ayer, por el Día de la Madre, la mujer contó que tenían planeado reunirse con sus ocho hermanos.

Las actuaciones policiales estuvieron a cargo de la comisaría primera de Florencio Varela. El conductor de la unidad, identificado como Héctor Sosa, permanecía alojado ayer por la mañana en la seccional tercera del partido. La instrucción de la causa quedó a cargo de la fiscalía en turno del Departamento Judicial del partido bonaerense de Quilmes.

Este episodio se sumó a otros accidentes fatales que protagonizaron colectivos en los últimos meses. En marzo de este año, dos niños murieron y otros resultó herido cuando estaban en un refugio y un colectivo los atropelló, en el partido bonaerense de General Rodríguez.

En ese caso, el choque se habría producido por una maniobra para evitar chocar con otro auto. Y hace poco más de dos meses, en el barrio porteño de Palermo, un colectivo de la línea 15 atropelló a una familia y murió un nene de cinco años.