Los Acuerdos Escolares de Convivencia (AEC) se extenderán a los colegios de nivel inicial y primarias, si prospera una propuesta del Ministerio de Educación de la Nación. “Estos acuerdos son canales de participación. Lo que buscamos con la ampliación es reforzar la relación entre la familia y la escuela porque más allá de las agresiones, que son ejemplos extremos, también es preocupante la distancia entre ambos”, explicó ayer a Página/12 Alberto Sileoni, titular de esa cartera. Esta implementación será debatida hoy en las terceras Jornadas Nacionales sobre Convivencia Escolar, luego de una semana signada por la agresión física de un alumno y su madre a un director de un colegio en Pergamino, provincia de Buenos Aires.

“La escuela sola no puede, tiene que haber una coeducación con la familia”, aseguró Sileoni, al referirse a lo ocurrido en Pergamino. El ministro destacó que los AEC se implementan en 7549 establecimientos de educación media, de los 9000 existentes en todo el país, tras su reglamentación en 2009. “Tienen un marco regulatorio general y cada colegio le pone su sello después. No sirve bajar recetas en este tema, una escuelita rural tiene problemas distintos de una urbana con chicos que provienen de áreas marginadas”, agregó.

Según comentó Fernando Onetto, coordinador del Programa Nacional de Convivencia Escolar del ministerio, los valores educativos básicos son el derecho a la educación, la inclusión, la participación, la resolución pacífica de conflictos y el diálogo y la aceptación de las diferencias, entre otros. “Lo que se rechaza explícitamente es la violencia, el abuso de poder y la discriminación”, dijo. Los AEC existen hace tiempo, aclaró, pero antes no tenían el respaldo del Estado, lo que hacía que muchas veces se judicializaran las decisiones de los consejos escolares.

“La ampliación a jardines de infantes y primarias servirá principalmente para acercar a los padres a la escuela aunque también podrían participar los chicos pero no con la fuerza de representación que tienen en otros niveles”, aclaró Onetto. Al consensuar normas de convivencia en estos primeros niveles podrían evitarse problemas posteriores. Según el funcionario, se puede comenzar por distinguir contextos de comunicación para que la escuela no sea un lugar “transparente” y sin identidad que la distinga de lo que dice y hacen en la calle y en el hogar.

Onetto aseguró a este diario que los problemas aparecen cada vez más temprano. “Y son cosas propias de pibes más grandes”, comentó. Por eso, el cambio en estos niveles, afirmó, debe vincular lo curricular con lo institucional. Es decir, que parte del contenido esté orientado a escuchar al que piensa distinto, a valorarlo y al mismo tiempo a desarrollar las habilidades sociales de los chicos en la negociación y construcción de consensos. “Las Jornadas van a servir para recapitular lo hecho y difundir distintas experiencias, como la del 0800 para urgencias en Córdoba, atendida por expertos de distintas disciplinas”, concluyó.

En el escuela Manuel Mujica Lainez, en el barrio porteño de Villa Lugano, los AEC son discutidos y actualizados todos los años para reglamentar desde el uso del celular hasta las netbooks del programa Conectar Igualdad. Allí, en el Consejo Escolar de Convivencia, donde tienen voto y voz, alumnos, padres, profesores y preceptores, se trató, por ejemplo, el caso de una alumna que había insultado a su profesora. “Y surgió, por alumnos, la idea de un grupo de ayuda y contención liderado por un psicopedagogo para alumnos con problemas familiares, afectivos, económicos, como esa alumna”, contó el director del colegio, Carlos Mirés. Tras las Jornadas Nacionales sobre Convivencia Escolar, la propuesta de ampliar las AEC será expuesta en el Consejo Federal de Educación y allí se decidirá su implementación en todo el país. La idea no es eliminar las sanciones, comentó el ministro Sileoni. “Hay cosas que no se hacen y no por conveniencia, sino porque no se deben hacer. La escuela no es solo un constructor de límites. Su éxito depende de que los alumnos internalicen los límites”, reflexionó el funcionario.

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