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Ante la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, los docentes porteños ratificaron su rechazo al proyecto del PRO que elimina las Juntas de Clasificación Docente y exigieron el archivo del despacho parlamentario.

Delegados de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y de la Asociación de Enseñanza Media y Superior (Ademys) expusieron ante las comisiones de Educación y Legislación del Trabajo de la Legislatura, donde protagonizaron duros cruces con los asesores de los diputados que debaten la iniciativa oficial.

El proyecto, presentado por el Ejecutivo porteño y que ya motivó tres paros docentes con alto acatamiento, deroga los artículos del Estatuto Docente que refieren a las Juntas y las reemplaza por una “oficina única” dependiente del Gobierno de la Ciudad.

La reunión se desarrolló en un Salón Intersecretarías colmado de docentes y tuvo momentos de tensión por los cruces entre asesores de algunos legisladores del PRO y los delegados y maestros presentes. Carlos Oroz, de Ademys, defendió la continuidad de las Juntas, que “son los órganos democráticos que garantizan la transparencia en la designación de los cargos docentes”. Durante su exposición, el representante gremial pidió “el retiro del proyecto porque carece de toda racionalidad”. En representación de UTE, el delegado Eduardo López pidió “a los legisladores y al ministro de Educación de la ciudad que recapaciten y archiven este proyecto que cambia drásticamente la carrera docente, con un sistema donde se asciende y se accede a los cargos por el dedo de los gobiernos de turno”.

López también advirtió que el PRO “tiene la voluntad política de disciplinar a los docentes y por eso vienen por las Juntas”, para las cuales, tal como sucede cada dos años desde su creación en 1986, el jueves 3 de noviembre se elegirán integrantes. López también adelantó que el viernes 4 los docentes se concentrarán frente a la Legislatura “con las urnas para decir a los legisladores que no se puede con el voto popular”. Mariano Denegris, de UTE, añadió que también se analiza la posibilidad de “instalar una carpa docente” y realizar “una medida de fuerza”. Es precisamente para ese día que está prevista la última reunión de las comisiones parlamentarias, en la cual el proyecto en cuestión podría obtener las firmas necesarias para pasar a su tratamiento en sesión ordinaria, en el recinto.