Aunque los padres siguen eligiendo nombres cortos para las niñas y de origen bíblico para los varones, este año la televisión y el cine renovaron el ranking y sumaron otros nuevos, inspirados en sus personajes. Isabella y Benicio fueron los más elegidos en la provincia de Buenos Aires para llamar a los bebés en 2011.

Según un relevamiento anual realizado por la Jefatura de Gabinete bonaerense, sobre 490 registros civiles de la provincia, uno de los nombres más elegidos para niñas fue Isabella (variante del nombre Isabel y de origen hebreo). Fue popularizado por la telenovela peruana Isabella, una mujer enamorada, y por la protagonista de la serie estadounidense Crepúsculo, Isabella Marie “Bella” Swan. Siguen en el listado de los más inscriptos este año: Valentina, Sofía, Juana, Martina, Morena, Mía, Lola y Alma.

En tanto, para los varones uno de los más solicitados fue Benicio, nombre del villano que encarnaba el actor Benjamín Vicuña en la serie Herederos de una venganza, emitida por Canal 13. “Benicio (también de origen bíblico) es uno de los nombres nuevos que más se están usando para los nenes. Continúan entre los más usados Benjamín, Bautista, Mateo, Santino y Valentín”, confirman desde el Registro Provincial de las Personas.

También se dio a conocer un listado de preferencias por ciudades. En La Plata, los más solicitados fueron Isabella, Lola y Valentina. En Bahía Blanca, Isabella también fue el más pedido, le siguen Emma y Jazmín. En Mar del Plata, Renata, Lola y Pilar encabezan la lista.

En el conurbano bonaerense, la localidad de Quilmes registra como los más elegidos a Isabella, Luna y Brisa. En cambio, en San Isidro, Uma, Mía y Jazmín lideran el podio. Por último, en La Matanza los preferidos fueron Mía y Sofía.

El ranking de los varones ubica a Thiago, Ciro y Benicio, entre los más solicitados por los marplatenses. Y en Avellaneda, Ian, Tomás y Benjamín se encuentran en la lista.

En la provincia de Buenos Aires existe un listado orientativo para facilitar “la elección de nombres”. La ley nacional 18.248 –sancionada en 1969 y modificada en los ‘80– plantea la necesidad de “preservar a las personas y garantizar que el nombre sea claro respecto del sexo del bebé y que no afecte en su vida de relación, ya sea por resultar ridículo o pasible de confusión”. También detalla que “no se aceptarán nombres extranjeros, salvo los castellanizados por el uso” (por ejemplo, Jonathan).

Por otra parte, desde el Registro bonaerense de las Personas sostuvieron que “el derecho a la identidad es fundamental para todo ser humano, y le asegura a cada persona hacer valer otros”. Asimismo, recordaron que la Constitución de la provincia de Buenos Aires dispone en su artículo 12 que “todas las personas que viven en el distrito tienen derecho a conocer la identidad de origen”.

En este sentido, Alberto Pérez, el jefe de Gabinete provincial, señaló que en los últimos cuatro años, a través del programa “Derecho Garantizado a la Identidad”, el gobierno de Daniel Scioli “regularizó la situación documentaria de 24 mil niños de entre 0 y 12 años, que ahora tienen su DNI y su partida de nacimiento”. Además, explicó que “todos esos pequeños tienen el reconocimiento del Estado y pueden ejercer todos sus derechos como personas y, a su vez, ser contenidos por todas las políticas puestas en marcha por el gobierno provincial y nacional, que protegen los derechos de los chicos y chicas”, sintetizó Pérez.

De igual forma, el artículo 7 de la Convención sobre Derechos del Niño (CDN) indica que “el niño será inscripto inmediatamente después de su nacimiento y tendrá derecho desde que nace a un nombre, a adquirir una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a conocer a sus padres y a ser cuidado por ellos”. Asimismo, el artículo 8 manifiesta que “los Estados Parte se comprometen a respetar el derecho del niño, a preservar su identidad, incluidos la nacionalidad, el nombre y las relaciones familiares”.