Con el suministro eléctrico restablecido, según la empresa Edenor, en casi el 90 por ciento de las zonas afectadas por el temporal en el conurbano bonaerense, ayer comenzó a normalizarse la situación. Así lo transmitió el coordinador del Consejo Provincial de Emergencia, Luciano Timerman, quien aseguró que ya no quedan evacuados. “Les pido paciencia y tranquilidad”, dijo el gobernador Daniel Scioli a la población, luego de destacar “el gran apoyo del gobierno nacional” en la asistencia a los afectados. La ministra de Desarrollo Social de la Nación, Alicia Kirchner, recorrió las localidades de Moreno, Quilmes y Campo de Mayo, donde equipos de trabajadores sociales de esa cartera relevan las necesidades de la población. En la Villa 21 de la Ciudad de Buenos Aires, según denunció la asamblea barrial de La Poderosa, la ayuda es insuficiente: “Trajeron algunos pocos colchones y nada más”, advirtieron.

“Pudimos revertir la falta de electricidad en González Catán, Lomas del Mirador, Castelar y ciertas zonas de Morón, pero hay inconvenientes en Moreno, Ituzaingó y Merlo porque precisamos que se saquen los árboles que sepultan los cables”, confió a este diario una fuente de Edenor, quien aseguró que 2000 operarios están trabajando y se trajeron refuerzos de Salta y La Rioja. Según explicó Timerman, siguen afectados los municipios de General Rodríguez, donde el servicio de luz está restablecido en un 70 por ciento, y Berisso, con un 50 por ciento de reposición eléctrica.

“Los hospitales tienen restablecido el servicio de luz y han apagado sus equipos de emergencia, se sigue entregando agua embotellada y hay camiones cisternas en puntos fijos”, informó el funcionario bonaerense, quien evaluó que “la tendencia es positiva en todos los municipios afectados en cuanto al restablecimiento de la luz y, por ende, el servicio de agua”. Timerman, al igual que Scioli, pidió a la población en general evitar los cortes de calles como forma de protesta porque retrasan la llegada de víveres, materiales y la reconexión eléctrica.

El intendente de Morón, Lucas Ghi, dijo ayer que “los números son preocupantes: 4500 árboles caídos y el 23 por ciento del distrito permanece sin luz y una gran parte sin agua; mientras que alrededor de 50 personas permanecen hospitalizadas”. “La situación es extremadamente crítica”, comentó Ghi. Sin embargo, luego aseguró que se está “gradualmente regularizando la situación”. Su par de la localidad de Moreno, Mariano West, afirmó que “hay un 50 por ciento del territorio sin energía eléctrica ni agua, por lo cual son más de 60 mil familias, lo que significa casi 300 mil personas”.

Para paliar esta crisis, en Moreno se distribuirán más generadoreseléctricos, sobre todo en la zona sur de ese distrito, que fue una de las más afectadas por el temporal. En la parte norte de este distrito, ayer se seguían suministrando alimentos y se entregaron siete mil chapas. El agua potable está restituida en un 55 por ciento y hay 10 cisternas de 5 y 10 mil litros permanentemente abasteciendo a los barrios. En Merlo, ayer se desarrolló un operativo de ayuda en los barrios más afectados: San Antonio de Padua, Libertad, Barrio Nuevo, Parque San Martín y Merlo Norte. Allí los vecinos exigen más generadores de energía y denunciaban que en lugares como Barrio Pompeya aún no había llegado ayuda municipal.

“Se trabaja para tratar de sacar los árboles de muchas partes, se habla de ocho mil a diez mil árboles caídos”, comentó ayer el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, quien declaró por decreto “zona de desastre” al municipio.

En La Matanza quedarían sólo cuatro barrios sin energía y resta poner en servicio solamente ocho subestaciones. El agua está restablecida en más de un 70 por ciento del distrito más poblado de la provincia,. Florencio Varela y Quilmes están siendo abastecidas por generadores, mientras se terminan las reparaciones y se liberan calles de postes y árboles. Ensenada está prácticamente recuperada, Berisso ya tiene el 60 por ciento del servicio, igual que Lanús y Berazategui.

Alicia Kirchner y el secretario de Seguridad Sergio Berni, recorrieron por la mañana las localidades de Moreno, Quilmes y Campo de Mayo para revisar la entrega de insumos y elementos de emergencia como agua, alimentos, chapas, colchones y frazadas. A la tarde, la ministra estuvo en Moreno para visitar el centro de abastecimiento donde voluntarios, personal municipal, del Ejército y de los ministerios de Seguridad y Desarrollo Social “trabajan solidariamente para dar una respuesta pronta, integral y articulada”, se informó oficialmente.

De las autoridades porteñas sólo estuvo el ministro de Espacio Público Diego Santilli, quien supervisó el trabajo de las cuadrillas en Villa Soldati. El viernes, tras las denuncias por el abandono estatal realizada por varias organizaciones sociales, la jueza Fabiana Schafrick ordenó al Ejecutivo porteño adoptar medidas para relevar la posibilidad de nuevos derrumbes, apuntalar los inmuebles y asistir a los habitantes de las villas 21-24, Fátima, Los Pinos, 15, 1-11-14, Lacarra, Carrillo y Escarpino, el asentamiento Magaldi, Zavaleta, entre otros.

La respuesta fue “tardía y descoordinada”, aseguraron ayer desde la Agrupación 14 Bis Derecho y agregaron, sobre la Villa 21: “Se está haciendo una distribución discrecional y arbitraria. La situación es caótica. No cumplen con la decisión judicial, ni se hizo ningún relevamiento”. Desde la Asamblea Vecinal La Poderosa, en barrio Fátima, aseguraron que el gobierno porteño aportó materiales “pero es un porcentaje mínimo”.

“Macri se fotografió muy orondo durante el TC2000 en el microcentro, pero se borró después del temporal”, dijo el legislador porteño Francisco “Tito” Nenna. El dirigente también criticó a Carolina Stanley, ministra de Desarrollo Social, y al jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, por irse de vacaciones.