Más de 60 personas murieron y 200 resultaron heridas durante una estampida que se produjo tras un espectáculo de fuegos artificiales en la ciudad de Abiyán, Costa de Marfil. Entre las víctimas hay muchos niños, y la cifra de muertos podría aumentar.

En Costa de Marfil es tradición que las familias salgan a las calles con todos sus hijos para dar la bienvenida al Año Nuevo. En ese marco, en Abiyán, la ciudad más grande y centro económico de Costa de Marfil, se desarrolló un espectáculo de fuegos artificiales. Una vez terminada la demostración, alrededor de la una, cuando más de 2 millones de personas intentaban volver a sus casas, se desató una estampida, cuyas causas no se conocen exactamente. En algunas calles poco iluminadas se produjeron de pronto grandes aglomeraciones y se desató el pánico.

“Mi novio se cayó y fue pisoteado hasta morir. Yo pensé que me iba asfixiar”, contó Rita Amah, una joven de 19 años. El diario Fraternité Matin precisó que las víctimas murieron aplastadas.

Hamed Bakayoko, ministro del Interior de ese país de la costa occidental africana, aseguró que se investigarán las causas de la estampida y que los eventuales responsables de fallas en la seguridad serán llevados ante la Justicia.

Alain Lobognon, ministro de Juventud y Familia del país de esa ex colonia francesa, visitó ayer a los heridos en el hospital de la ciudad y llamó a los ciudadanos a donar sangre.

Anoche, muchos padres todavía buscaban a sus hijos desaparecidos. Quedaban internados 50 heridos y, según una fuente del Hospital Universitario de Abiyán, “la cantidad de muertos podría aumentar”.