Decenas de parejas montaron un “besódromo” y se besaron simultáneamente en el Parque Centenario, en protesta por la actitud de los guardianes del enrejado paseo que intentaron separar a varias de ellas, amparados en “una cuestión de sentido común y de respeto a la sociedad”, por la forma en que se sentaban uno arriba del otro. Los participantes se autoconvocaron por Facebook con la provocativa consigna “Haciendo el amor en el Parque Centenario”, que recibió casi 5 mil adhesiones, aunque en la mayoría de los casos sólo quedaron en esa expresión virtual. La organizadora fue Manón Chapolart, una francesa de 27 años que vive hace cuatro en la Argentina, quien tomó la iniciativa al enterarse de que al menos a dos de sus amigos les llamaron la atención mientras estaban con sus parejas. “Una guardiana nos vino a decir que nos sentáramos bien por una cuestión de sentido común, de respeto a la sociedad”, contó uno de los afectados llamado Lucas, quien al momento del hecho se encontraba sentado en el pasto con su novia Victoria sobre sus piernas. En tanto, Chapolart dijo que a una amiga suya que estaba con su pareja le dijeron que se separase, ya que alguien se había quejado porque no soportaba ese contacto delante de sus hijos. Una guardiana –de unos 50 años, uniformada por un chaleco fluorescente y con silbato colgado al cuello, que prefirió no dar su nombre– aseguró a Télam que no tenía ninguna indicación de sus superiores sobre las parejas, aunque admitió que a veces, cuando ve a una pareja en la que está uno arriba del otro, les dice “si se pueden sentar bien”. Cuando se lanzó la consigna de besarse, decenas de parejas heterosexuales y homosexuales, y hasta tríos, se besaron ostensiblemente junto a la estatua del lago, en un clima de alegría desafiante.