El juez de Instrucción Alberto Baños solicitó la “inmediata detención” del cantante canadiense Justin Bieber y dos colaboradores para poder tomarles declaración indagatoria, en una causa en la que están imputados por presunta agresión. El hecho por el que el cantante está acusado ocurrió en noviembre de 2013 cuando, en el boliche Ink, del barrio de Palermo, Bieber y sus colaboradores agredieron a un fotógrafo y un camarógrafo que intentaron retratarlo. El magistrado había advertido que si Bieber no se presentaba dentro los 60 días de notificado, podría ordenar su captura para que se haga efectiva en el lugar en el que sea hallado. El ídolo juvenil ya tuvo frecuentes problemas con la Justicia, incluso en su país natal.

El juez Baños pidió a Interpol la captura internacional del cantante canadiense Justin Bieber y de Hugo Alcides Hesny y Terrence Reche Smalls, dos de sus colaboradores con los que estuvo en la Argentina. Por este motivo encomendó al Departamento Interpol de la Policía Federal Argentina que “arbitre los medios necesarios para lograr ubicar a los requeridos”, ya sea “en los domicilios donde residen, en el lugar donde tengan previsto realizar un evento o en cualquier otro lugar”. Agregó que a los imputados se les había notificado que debían “presentarse ante este tribunal dentro de los 60 días”, ya que si no lo hacían y no justificaban su incomparecencia “se ordenaría su captura”.

Con la intervención de la secretaria Soledad Nieto, el magistrado quiere “cumplimentar las declaraciones ordenadas” por su colega Facundo Cubas, pues existe un “grado de sospecha que habilita su convocatoria a tenor de lo normado por el artículo 294 del Código Procesal Penal” que establece las circunstancias en que procede el llamado a indagatoria ante la “sospecha” de que el cantante fue instigador de la acción de los guardaespaldas. El pedido a Interpol fue cursado el 8 de abril, pero se conoció recién ayer.

A Bieber y a sus custodios se les atribuyen supuestos ilícitos registrados el 9 de noviembre de 2013 en el boliche Ink, ubicado en Niceto Vega al 5600 de la ciudad de Buenos Aires, cuando fue agredido el fotógrafo Diego Facundo Pesoa y un camarógrafo. También se les atribuye la sustracción de cámaras y teléfonos celulares, y retirarse del lugar sin pagar. Tras la demanda del fotógrafo, la Justicia embargó bienes del músico retenidos en la Aduana por 30 días por el valor de 960 mil pesos (por entonces unos 160 mil dólares).

La única visita de Justin Bieber a la Argentina en el marco de su gira Believe Tour tuvo ribetes escandalosos. El cantante fue echado del hotel donde se alojaba y suspendió uno de sus shows cuando iban apenas 45 minutos de concierto por dolores estomacales.