La colectividad china en la Argentina deja atrás el Año de la Cabra de Madera y festejará este fin de semana el inicio del año 4714 de su calendario, regido por el Mono de Fuego. Hoy y mañana actuarán en el barrio porteño de Belgrano artistas chinos y de otras colectividades, danzarán dragones y leones, habrá un desfile de trajes étnicos de China y se montará una feria de decoración, ropa, comidas y bebidas típicas de Oriente. Este año la celebración tendrá lugar en la plaza Parques Nacionales, cerca del tradicional Barrio Chino. Los organizadores solicitan a los concurrentes llevar un alimento no perecedero que será destinado a las diferentes obras de caridad. Los fuegos artificiales culminarán la festividad.

Como cada año, la colectividad china en el país organiza el Festival de la Primavera, conocido como Año Nuevo Chino, presentado por la Embajada de la República Popular China.

Los festejos que se llevaban a cabo en el Barrio Chino de Belgrano se trasladaron desde hace tres años a otros espacios, debido a las miles de personas que se suman a la celebración. En esta ocasión, el evento se desarrollará en la plaza Parques Nacionales, en avenida Figueroa Alcorta entre Sucre y Echeverría. Allí funcionará una feria de comidas, habrá clases de técnicas de tai chi, a cargo del maestro Liu Ming, y de chi kung, guiadas por la maestra Chen Ming, además de un desfile de moda étnica con vestuario traído especialmente desde China.

Carola Wen, una de las organizadoras, contó que son unas “180 mil personas chinas las que vivimos en la Argentina, y es alto el porcentaje que hace el esfuerzo de iniciar el año con sus familiares”. Sobre la gastronomía, en la mesa china “no puede faltar la empanada hecha al vapor, que tiene forma de moneda antigua porque simboliza iniciar el año con dinero”. Otro clásico es el “arrolladito primavera”, hecho de “bolitas de arroz gratinado dulce, alegóricas a la reunión y la unión”. En China, las bebidas no tienen tanta importancia como la comida. Allí simplemente se bebe agua caliente (para la cultura china el té es agua con sabor) y esto obedece a la necesidad de hervir el agua porque escasea la potable. Aunque en determinadas ceremonias –y con la modalidad conocida acá como “fondo blanco”– se toma baijiu, una bebida destilada del arroz que tiene 53 de graduación alcohólica, entre otras derivadas del mijo y del sorgo. Todo el arte culinario de Oriente podrá degustarse hoy entre las 14 y las 23, y mañana entre las 10 y las 21.

Pero lo central llegará con la Danza del Dragón y el ritual del “Clavado de Pupilas” para despertarlo de su letargo, que augura buena fortuna a los presentes y a los comercios de la zona. Los colores rojo, verde, amarillo, oro y plata son los utilizados para “animar” al ser mitológico, que luego dará lugar a la Danza de los Leones con pasos de acróbatas, percusiones y sonidos de gong “que llamarán a la buena suerte”.

“Por primera vez, la realidad multiétnica china entra en el festejo, con las diferentes regiones que son habitadas por 56 etnias y una historia que se hunde en los tiempos”, contó a Página/12 el escritor Gustavo Ng, activo promotor del encuentro “de integración y diversidad cultural”. En el Horóscopo Chino son cinco los elementos que rigen sobre cada animal y rotan cada 60 años: metal, agua, tierra, fuego y madera. Para la cultura china, el mono es un animal superior porque es inteligente y el más cercano al hombre. Ng abunda al respecto: “El chancho, la cabra y el mono son los que inventan el mundo; los otros animales lo dominan o lo afirman. La cabra –año que acabamos de dejar– recrea el mundo como hecho artístico. En cambio, el mono hace el mundo y acaba generando algo nuevo por su gran capacidad oratoria.” ¿Algunos “monos ilustres”? Sigmund Freud, Leonardo da Vinci, Anton Chéjov, Federico Fellini y Arthur Schopenhauer.

Lo dicho: el año 4714 para Oriente estará regido por este “alegre e inquieto animalito que tendrá mucho trabajo y deberá ser precavido porque siempre necesita encontrar un sentido nuevo a las cosas. Pero cuando no lo logra, se aburre mortalmente y tiende a deprimirse”, concluye Ng.