Una mujer fue asesinada de 17 puñaladas delante de sus tres hijos pequeños en su casa del partido bonaerense de Morón. Por el femicidio detuvieron a su ex pareja, que la acosaba y amenazaba para retomar la relación. Cintia Laudonio, de 34 años, ya había denunciado por violencia de género al ahora aprehendido Cristian Halliú, de 37 años y padre de uno de los niños que presenciaron el ataque. El hecho ocurrió en una casa situada en Curuchet al 1600 de la localidad de Castelar, donde la mujer se encontraba con sus tres hijos, todos menores de edad. Presuntamente el homicida arribó al lugar a bordo de un auto, saltó las rejas de hierro del frente de la casa y violentó una ventana para poder entrar. Una vez adentro, el agresor sorprendió a Laudonio en el cuarto en el que dormía, la apuñaló varias veces y huyó. La mujer alcanzó a llegar hasta el baño, donde cayó desvanecida. La hija mayor de la víctima llamó a sus abuelos y les avisó sobre lo ocurrido. Los familiares arribaron a la escena del crimen y se encontraron con los tres hijos de la víctima en la puerta de la casa, “parados detrás de la reja; no hablaban. La nenita más grande tenía manchas de sangre”, contó un cuñado de Laudonio. Acerca del cuerpo, los peritos certificaron que la primera de las 17 puñaladas “cortó la aorta” de la víctima. El juez de Garantías de Morón Alfredo Meade, a pedido de la fiscal de la causa Valeria Courtade, ordenó la detención del femicida, que fue localizado ayer por la tarde en la localidad balnearia de Mar de Ajó.