SOCIEDAD › 3.250.000 TURISTAS DEJARON 2.200.000.000 DE PESOS
Volvieron y fueron millones
El ingreso de turistas durante las vacaciones de invierno fue 21 por ciento mayor al de 2003. Los porteños recibieron 540 mil visitantes que desembolsaron más de 860 millones de pesos.
Escuchar una tonada o un idioma poco familiar se perfila como moneda corriente en los centros turísticos de la Argentina. Pero no es sólo una percepción. Durante las vacaciones de invierno, los principales destinos registraron casi 3.250.000 arribos, 21 por ciento más que el año pasado. Traducido en ingresos, el número de visitas significó unos 2200 millones de pesos. Los lugares más elegidos: la costa atlántica y Capital Federal. A este último distrito llegaron más de 540 mil turistas, cifra record en los últimos años y 14 por ciento mayor que en 2003, que gastaron más de 860 millones de pesos, según afirmó ayer el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra.
La expectativa de un crecimiento del 12 por ciento “ha sido superada holgadamente, plasmando un crecimiento del 21 por ciento de arribos a los destinos de nuestro país en relación al mismo período del año 2003”, señala un informe provisorio elaborado por la Secretaría de Turismo de la Nación, en base a datos proporcionados por organismos provinciales y municipales del área. Los datos fueron tomados desde el fin de semana largo del 9 de julio, en el que el movimiento superó en un 44 por ciento al de 2001, hasta finales de ese mes.
En total, el informe indica que se produjeron 3.249.070 arribos a centros turísticos de todo el país. Los destinos de la costa atlántica “fueron los que registraron el crecimiento más pronunciado, con un 26 por ciento por encima de 2003, y una ocupación hotelera del 55,43 por ciento”, indica el informe. Sólo a Mar del Plata ingresaron 247.179 turistas. En este sentido, el secretario de Turismo de la Nación, Enrique Meyer, manifestó que los centros más visitados “estuvieron acorde con lo que ofrecen”. En Bariloche se registró “un 75 por ciento de ocupación hotelera”, detalló el funcionario. Y añadió que “en esta ciudad, fue una temporada record en afluencia de vuelos regionales desde Brasil, Uruguay y Chile. Y aumentó entre 45 y 47 por ciento el número de turistas extranjeros respecto del año pasado”.
Según estos datos de la Secretaría de Turismo, se produjeron 390.000 arribos desde otros países, representando el 14,5 por ciento del total de llegadas. El principal receptor fue la Ciudad de Buenos Aires. “Tuvimos 70.000 turistas más que el año pasado”, aseguró Ibarra a Página/12. En términos monetarios, el incremento de visitantes significó más de 860 millones de pesos. Y pese a que buena parte de los turistas llegó desde el interior del país, el 51 por ciento del total de visitantes arribó desde otros países, en su mayoría de Brasil y Chile, aunque también buena parte desde otros países de Latinoamérica y Europa.
Entre el 9 y el 31 de julio, el número de turistas en las calles y barrios más concurridos de la ciudad se hizo notar: según los datos de la Subsecretaría de Turismo porteña, ingresaron 542.310 visitantes. Durante esos días, el nivel de ocupación de los hoteles fue del 77 por ciento, aunque el pico más alto se registró en la segunda semana de vacaciones, cuando alcanzó el 82,2 por ciento. Ibarra señaló que “las campañas de promoción en Argentina y en los países limítrofes, para instalar a la ciudad como un centro turístico tuvieron un fuerte impacto en la sociedad”.
La industria del turismo se fortaleció en los últimos dos años ya que, tras la devaluación, se convirtió en una tentadora puerta de entrada para divisas externas. Durante las vacaciones, los ingresos en la ciudad fueron de 861.165.070 pesos. Y de ese monto, el 68 por ciento fue desembolsado por turistas extranjeros. La cifra global de ingresos equivale a un 14 por ciento más de gasto que el año pasado. El desembolso promedio diario de los turistas del interior, cuya estadía media fue de siete días, rondó los 146 pesos.
“Los resultados exitosos nos obligan a renovar el compromiso con esta política de Estado vinculada al turismo”, enfatizó Ibarra durante una conferencia de prensa brindada ayer, de la que también participó Meyer. Entre los visitantes, hubo de todo: desde los gasoleros hasta aquellos que no escatimaron en gastos. Así, se beneficiaron los hoteles de mayor y menor categoría, que en su mayor parte fueron ocupados por argentinos provenientes de otras provincias.