SOCIEDAD › UN CHICO SEÑALO DONDE SECUESTRARON A FERNANDA
Testigo clave en Entre Ríos
Fernanda Aguirre sigue sin aparecer, a 9 días de haber sido secuestrada. Ayer continuaron los operativos en su búsqueda. Al caso se agregaron dos nuevos testimonios. Uno pertenece a un sobrino del sospechado Miguel “el Paraguayo” Lencinas y su mujer, Mirta Chávez, quien indicó que a la chica la habían ocultado inicialmente en una tapera dentro de un campo cercano al pueblo. La aparición del nuevo testigo no sólo agregó complicaciones a la pareja de sospechados: también desató críticas del jefe de la policía entrerriana, Ernesto Geuna, contra la Justicia porque, según el comisario, le impidió llevar al Paraguayo a la tapera señalada. Una mujer declaró como testigo de identidad reservada y afirmó la versión dada por el sobrino de Lencinas. Se realizó otra marcha en reclamo de justicia.
Un chico de 15 años, sobrino del Paraguayo, declaró a la policía que, tras el secuestro de Fernanda, su tío le dio 10 pesos y le dijo que se iba a encargar él solo del resto. Según el testimonio, a Fernanda la metieron a empellones en una tapera, dentro de un campo de una familia de apellido Pintos, tres kilómetros al sur de San Benito. La policía inició la búsqueda en el campo, con el apoyo de perros especializados en rastros. Aunque, pasado el mediodía, se retiraron sin obtener resultados. Pero una mujer también aportó su testimonio, reforzando la versión del chico. Según la testigo, al pasar por el lugar pudo ver a Lencinas y a un menor, que sería su sobrino, apoyados contra un árbol. Según la versión del menor, el secuestro fue para cobrar el rescate de 2 mil pesos, ya que estaban enterados de que los padres de Fernanda habían cobrado esa suma por la venta de un trailer.
El comisario Geuna criticó a la Justicia porque, según él, le “impidió llevar a Lencinas al campo para realizar un reconocimiento”. La polémica fue desatada cuando una marcha en reclamo de justicia se detuvo frente a la comisaría y Geuna salió a hablar con los familiares. Para hoy anunciaron otra marcha, ahora en el centro de Paraná. A todo esto, el Concejo Deliberante local declaró su repudio al juez Retamoso, quien concedió las salidas transitorias a Lencinas, pese a estar condenado a 20 años por tres homicidios.