SOCIEDAD › SE VA DEL PAIS POR LA INSEGURIDAD
Almeyda no es rojo
El mediocampista Matías Almeyda desistió de jugar en Independiente, club para el que tenía previsto debutar mañana frente a Almagro, debido al temor por la seguridad de su familia. Y anunció que se irá a vivir al exterior. Según lo difundido por fuentes cercanas al ex mediocampista de River Plate, el jugador habría sido informado por autoridades policiales de un posible secuestro que podría sufrir uno de sus familiares directos, razón que llevó a romper el efímero vínculo que había comenzado con la entidad de Avellaneda.
Desde la oficina de su representante, Marcos Franchi, Almeyda envió un mensaje a la prensa y a los hinchas. “He tomado la decisión de no jugar en el fútbol argentino. La decisión es residir en el exterior”, comienza la carta. “Honestamente no encuentro palabras y me siento muy mal por no haber satisfecho la voluntad del presidente Julio Comparada y el técnico Daniel Bertoni, quienes me ofrecieron lo que quería y aún más, poniendo de parte de ellos toda la voluntad debido al sentimiento que tienen con Independiente”, dice el comunicado firmado por el mediocampista.
El vicepresidente de Independiente, Fernando Sciaccaluga, manifestó que Almeyda no había firmado aún su vínculo con el club, sino un precontrato. “No podés obligar a un jugador a quedarse en el club o, en este caso en el país, si no quiere”, aseguró el directivo, el único dirigente que mencionó explícitamente motivos exclusivos de seguridad como argumento de irse del país. Idéntico argumento había utilizado el año pasado Eduardo “Chacho” Coudet para irse del país, aunque meses después –sin merma del índice de secuestros– regresó al país para volver a jugar al fútbol.
Hace poco más de un mes, un detenido en una cárcel bonaerense había informado que Almeyda y alguno de sus familiares directos figuraban en una lista de personas pasibles de ser secuestrados, dato que las autoridades policiales no ocultaron al jugador, quien pese a todo había decidido regresar a la Argentina. El jugador, de 30 años, se entrenó con el plantel del club de Avellaneda hasta el martes pasado. En el final del escrito distribuido a la prensa, Almeyda remarcó: “Les pido perdón a mis compañeros”.