SOCIEDAD › LA MUJER QUE LE ARRANCO LA LENGUA A SU VIOLADOR
“No pensé en llegar a tanto”
“Fue un momento de desesperación, él estaba encima mío... No fue intencional, no pensé que podía llegar a tanto”, relató Ana, la chica que el sábado pasado sufrió un intento de violación en el barrio porteño de Flores y cortó la lengua de su victimario. Luego de hacerse una serie de análisis que determinarán las consecuencias físicas del ataque, la joven de 22 años pidió que su agresor quede “de por vida” en la cárcel. “Espero que a partir de ahora se tomen medidas, no puede ser que una no pueda hacer su vida tranquila. Nadie tiene derecho sobre la vida de nadie y quiero que quede adentro de por vida.”
Según el relato de Ana, su victimario se le acercó mientras esperaba el colectivo 86 la esquina de Nazca y Rivadavia, para volver a su casa, en Villa Celina, partido de La Matanza, y le ofreció tomar una cerveza o drogas. Ella se negó y fue llevada a dos cuadras de esa esquina, donde pasan las vías del ferrocarril Sarmiento. Allí el muchacho comenzó a atacarla y ella, para que él se detuviera, le dijo que aceptaba tomar una cerveza. Pero el hombre le dijo que se callara, que si no la iba a matar, y siguió. “En el momento en que intentó besarme lo mordí, pero pensé que no iba a llegar a tanto. En se momento él salió de encima y después se fue corriendo”, recordó, aunque no precisó si la violación había sido consumada.
José, un kiosquero que declaró como testigo en la causa, contó a Página/12 que “no me pareció” que haya sido una violación porque antes “los había visto transando (besándose)”; y añadió que “el pibe era normal, rubio de pelo enrulado (sic). No había nada raro, salvo que los dos parecían un poco borrachos”.
Para minimizar la acusación de tentativa de violación, la madre del agresor manifestó sus sospechas sobre la acusación que pesa sobre su hijo: “Algo pudo haber pasado, porque estuvieron juntos en el baile y estaban los dos borrachos”. En diversas entrevistas periodísticas, la madre del atacante explicó que a su hijo “le van a tener que hacer un análisis de HIV” porque su sangre entró en contacto con la de la víctima.
Sin embargo, en diálogo con este diario, Jorge, el padre de Ana, destacó que su hija “tiene una entereza elogiable” y que “nunca provocó que le pasara” lo que le sucedió, “así que espero que la Justicia no tenga en cuenta lo que andan diciendo todos los que por ahí andan queriendo embarrar la cancha”.