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La onda expansiva del tsunami cruzó el Pacífico y llegó hasta Chile, pero resultó ser una falsa alarma. El alerta, sin embargo, existió y tuvo consecuencias trágicas, aunque no de la magnitud que tuvo en el sudeste asiático: una mujer murió y por lo menos 17 mil personas huyeron despavoridas hacia los cerros, en la zona de Concepción, en el sur de Chile. La falsa alarma fue atribuida a un grupo de pescadores artesanales, que alertaron que el mar se había recogido en forma similar a lo que fue el preludio de la catástrofe en Asia. Sin embargo, el alerta se propagó por internet y llamadas telefónicas. El gobierno chileno calificó el episodio como una "broma macabra".
La masiva huida de habitantes y turistas desde las comunas de Concepción, Hualpén, Talcahuano, Coronel y San Pedro de la Paz comenzó a las 2 locales (la misma hora en la Argentina) y provocó accidentes de tránsito menores y crisis de pánico entre los pobladores.
Tal fue el pánico que cundió en la región que una mujer murió a raíz de una crisis cardio-respiratoria, informó Radio Bío Bío, y varias personas fueron atendidas en los hospitales de la región con síntomas de preinfartos y crisis de histeria.
El pánico se desató pese a los llamados a la calma formulados por las autoridades regionales, que descartaron la posibilidad de un tsunami. Juan Cayupi, jefe de turno de la Oficina Nacional de Emergencias, descartó la posibilidad de que se registre un maremoto en las costas chilenas, ya que no se había registrado ningún episodio sísmico en la plataforma submarina contigua al territorio de ese país que pudiera “conllevar a un tsunami”.
El funcionario citó antecedentes del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada para asegurar que “los niveles del mar están dentro de los rangos habituales”. Cayupi indicó que hubo un sismo de 6,6 grados de magnitud en la escala Richter, a las 17 de ayer, en las Islas Micronesia, cerca de las costas de Australia, lo que puede haber motivado el rumor sobre un tsunami.
El experto aseguró que ese fenómeno “no reunía las condiciones para generar un tsunami en las costas chilenas”. Sin embargo, recalcó que sí puede causar cambios en las mareas en áreas cercanas al epicentro.
Pese a las advertencias de las autoridades, miles de pobladores utilizaron camiones, automóviles y camionetas para huir despavoridos, algunos con sus enseres, hacia los cerros y partes más altas frente a Concepción, donde permanecieron durante muchas horas.
El tsunami que devastó las costas del sudeste asiático ocurrió el domingo 26 de diciembre, después de un terremoto que tuvo como epicentro la plataforma submarina, cerca de la isla de Sumatra, en Indonesia. Al menos murieron 160.000 personas y otras miles siguen desaparecidas, entre pobladores nativos y turistas. El fenómeno afectó a Indonesia, Tailandia, Malasia, Sri Lanka y la India.