SOCIEDAD
Condena
El policía federal Roberto Carlos Pérez Acuña fue condenado a 12 años de prisión por ejecutar de un balazo en la cabeza a un joven ladrón que estaba herido en el piso. Facundo Acosta había asaltado junto a un cómplice un comercio de Donato Alvarez al 2100. Para huir, los esperaba un Peugeot 405 al que sólo llegó uno de los ladrones. A Acosta lo persiguió por la calle Pérez Acuña, quien circunstancialmente estaba en el lugar. Tras unos disparos, el ladrón cayó herido. Pérez Acuña se acercó, pateó su pistola y lo remató. Según el informe forense, “el disparo que mató a Acosta fue efectuado con la boca del arma de fuego apoyada, en contacto firme o laxo, o a lo sumo, a una distancia de entre 1 a 2 centímetros, disparo que resultó mortal”. La estrategia del policía para rechazar la acusación de homicidio simple consistió en desvirtuar el informe forense intentando demostrar que al ladrón lo mató alguno de sus cómplices, pero no pudo probarlo ante la Justicia. Adolfo Casabal Elía, abogado del federal, anticipó que apelará el fallo ante el Tribunal de Casación, ya que “durante el juicio hubo testigos que dijeron que el policía no fue quien disparó y no los tuvieron en cuenta”.