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Tras la reforma del Código Civil en España, ayer se realizó en ese país la primera boda entre dos personas del mismo sexo. Un español y un norteamericano se casaron en el Ayuntamiento de Tres Cantos, 15 kilómetros al norte de Madrid. “Como somos una familia, hemos querido casarnos como hacen todas las familias”, afirmó la pareja.
Los contrayentes fueron el español Emilio Menéndez y el norteamericano Carlos Baturín, quienes se conocieron hace más de treinta años en las calles de Madrid. Ambos entraron del brazo de sus madres al salón del Ayuntamiento donde se desarrolló la boda.
El pasado 30 de junio, en el Parlamento español se aprobó una reforma del Código Civil que equipara legalmente los matrimonios entre personas del mismo sexo y los de parejas heterosexuales. El cambio fue impulsado por el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, con el voto en contra de la oposición conservadora del Partido Popular.
Esa ley entró en vigor el 2 de julio. Después de Holanda y Bélgica, España se convirtió en el tercer país del mundo en autorizar los matrimonios entre homosexuales. Ayer, durante la primera ceremonia que selló ese proceso, la hermana de Emilio felicitó a la pareja. “Es todo un reto, un acto de valentía y de coherencia con vuestra vida –definió Marta Menéndez–. Merecéis vivir en paz y alegría.”
El concejal de Izquierda Unida de Tres Cantos, José Luis Martínez Cestau, estuvo a cargo de casar a la pareja. Según refirió, sentía una “especial ilusión” porque con la reforma del Código Civil se puso fin a “una serie de injusticias”, y la definió como “ejemplo de igualdad entre todos los ciudadanos”. Al mismo tiempo, el concejal trajo a colación la Declaración Universal de Derechos Humanos y la Constitución y el Código Civil de España. Martínez Cestau terminó destacando que “los españoles son iguales ante la ley sin discriminaciones”, y que los cónyuges tienen derecho a contraer matrimonio con “plena igualdad jurídica”.
Antes de preguntar a la pareja si aceptaba contraer matrimonio, el concejal puso de relieve que ambos estaban “haciendo historia, una historia que no va contra nadie sino que contribuye a construir un camino de felicidad y respeto”, manifestó el concejal español. “Que la risa y la ternura os acompañen toda la vida”, fueron las palabras finales del funcionario.
Tras ser declarados “unidos en matrimonio”, Emilio y Carlos intercambiaron sus anillos y se abrazaron, en medio de aplausos. “Quiero decirle a todo el mundo que el amor es muy bonito, que somos familia y, como somos familia, hemos querido casarnos como hacen todas las familias”, señaló Menéndez. Su pareja concluyó: “Hoy somos un poco más familia”.
Los dos declinaron la posibilidad de adoptar, al considerarse “mayores” para hacerlo. Sin embargo, Baturín especuló con que “si nos pilla años atrás lo hubiéramos hecho, posiblemente”. La pareja prevé una celebración entre amigos y familia para octubre próximo. Antes, en septiembre, irán de luna de miel con un crucero por los mares Adriático y Egeo. Fue un regalo de la madre de Emilio, quien tiene 88 años y fue testigo de la boda.
Aunque bromearon diciendo que esperaban una “ceremonia íntima”, Menéndez aseguró más tarde que no les importó la presencia de los periodistas, porque así podrán demostrar que “somos gente normalita, y que lo que queremos es ser felices”. Los dos agradecieron al presidente José Luis Rodríguez Zapatero “por cumplir las promesas electorales”, así como a los políticos “que han apoyado la ley”.