SOCIEDAD
Plan para regularizar los clubes que tienen sus estadios en orsai
A través de un decreto, Ibarra les dio un año de plazo a Boca, River y otros diez clubes para que habiliten sus estadios.
Por Eduardo Videla
De los diecisiete estadios de fútbol que hay en la ciudad de Buenos Aires, sólo cinco están habilitados con todas las de la ley. El resto –incluidos la Bombonera y el Monumental– están considerados como campos de deportes o simples clubes, categorías que no alcanzan a cubrir los requisitos para garantizar la asistencia masiva de público. Por eso, necesitan inspecciones y habilitaciones precarias que se realizan cada semana, antes de cada partido. Para terminar con esa incertidumbre, el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, firmó ayer un decreto de necesidad y urgencia que otorga un plazo de un año a los clubes para poner sus estadios en regla y obtener la habilitación definitiva. La medida –que debe ser convalidada por la Legislatura– fue apoyada por el presidente de la AFA, Julio Grondona, y los responsables de los clubes involucrados.
Para muchos no era un buen día para hablar de fútbol y así lo manifestó el propio Grondona, aludiendo a los seguidores de River –entre ellos, el propio Ibarra–, todavía afligidos por el resultado en la Copa Sudamericana. El más distendido era el secretario de Seguridad, Diego Gorgal –hincha de Vélez–, quien fue el encargado de las explicaciones técnicas. “La situación no es por culpa de los dirigentes de fútbol: la normativa es vieja y contradictoria y por más que muchos iniciaron trámites de habilitación, nunca los terminaron”, argumentó.
De los 17 clubes que tienen estadios en la ciudad de Buenos Aires, están en regla sólo cinco: San Lorenzo (que habilitó su nuevo estadio, en el Bajo Flores en 1993), Vélez Sarsfield, Ferro y Defensores de Belgrano (los tres, habilitados en 1968) y Barracas Central (en 1969). De los otros doce, hay cuatro que tienen en trámite su habilitación como estadios: Argentinos Juniors, Huracán, Nueva Chicago y Sacachispas.
Entre los restantes están nada menos que Boca y River. La Bombonera fue habilitada en 1930 como campo de deportes y desde entonces sigue bajo la misma normativa. El Monumental quedó encasillado en la misma figura, en la habilitación que se le otorgó en 1945.
“Están en una situación irregular que no le conviene a nadie: hay que habilitarlos provisoriamente para cada partido, lo que genera gastos y una situación de vulnerabilidad”, dijo Gorgal.
El decreto de necesidad y urgencia firmado ayer por Ibarra y Gorgal, y que debe ser refrendado por la Legislatura, les otorga a los clubes un año de plazo para regularizar su situación. En ese lapso se va a actualizar la normativa: los estadios deberán contar con salidas de emergencia, con recorridos señalizados y un plan de evacuación a la vista de los concurrentes, entre otras medidas de seguridad. “La norma actual exige que los baños tengan agua caliente y espejos. Esto último se va a eliminar por los riesgos en materia de seguridad”, puso como ejemplo Gorgal. El funcionario aclaró que el decreto firmado ayer no exime a los clubes de la inspección semanal. “Si dentro de un año no cumplen con las normativas, serán clausurados”, advirtió.
“Lo peor de todo es querer hacer las cosas bien y no poder hacerlas”, dijo Grondona, deslindando la responsabilidad de la falta de habilitación en las autoridades de turno.
–¿Por qué, en tantos años, algunos dirigentes consiguieron la habilitación y otros no lo lograron? –le preguntó este diario.
–Porque los gobiernos de turno han cambiado muchas veces las normas. Se empezaba el trámite con una disposición que luego quedaba en desuso.
En el acto, realizado en el Salón Blanco del Palacio de Gobierno, estuvieron presentes, además de Ibarra, Gorgal y Grondona, el subsecretario de Seguridad en los Espectáculos Futbolísticos de la Nación, Javier Castrilli; el director de Deportes de la Ciudad, Daniel Bravo, y los presidentes de los clubes de fútbol con sede en la Capital Federal que militan en los torneos de AFA. Por supuesto, no asistió Mauricio Macri, con licencia en la presidencia de Boca, pero tampoco lo hicieron otros representantes del club. Estuvieron presentes ex futbolistas como Victorio Cocco, titular de la Asociación de Directores Técnicos, y sus colegas Pedro González y el Chango Cárdenas.
El jefe de Gobierno sostuvo que los clubes que no cuenten con el dinero suficiente para las obras serán ayudados por el Estado. “Lo más importante es que sepan qué obras tienen que hacer. Después, la voluntad es que todos los clubes se puedan ajustar a las normas. Desde el Estado se va a hacer todo lo posible para que esto se alcance”, indicó Ibarra. Cuando se le preguntó si estas medidas eran un efecto post Cromañón, respondió: “Si es así, bienvenido sea”. “Las leyes de habilitación de los estadios datan de cuarenta o cincuenta años. Era una situación de arrastre de muchas décadas y por suerte ahora la podemos regularizar”, concluyó.